La Administración Nacional de Electricidad obtuvo un préstamo de US$ 70 millones del BID, acompañado por otros US$ 70 millones del BEI y un aporte no reembolsable de US$ 11,5 millones de la Unión Europea, para fortalecer y expandir el sistema de transmisión eléctrica del país. El proyecto incluye obras estratégicas como la nueva Subestación Emboscada de 500 kV y la modernización del sistema de gestión comercial, con el objetivo de mejorar la confiabilidad y eficiencia del suministro para más de 1,8 millones de usuarios.