Quito- El World Energy Outlook 2025 confirma que, bajo el escenario de políticas actuales (CPS, por sus siglas en inglés), la demanda de petróleo continuará creciendo hasta 2050 y el crudo seguirá siendo el principal combustible del mundo. Para Ecuador, que atraviesa una de las caídas de producción más profundas de su historia reciente, este escenario global implica mayor competencia, presión fiscal y riesgo de pérdida estructural de ingresos.