El litio es el tercer elemento de la tabla periódica. Es el metal más ligero y menos denso, aunque nunca se encuentra en estado puro en la naturaleza, ya que es demasiado reactivo para existir sin estar unido a un compuesto. Los iones y minerales de litio aparecen en una impresionante variedad de entornos: rocas duras, salmueras líquidas, arcillas blandas e incluso, en concentraciones muy bajas, en los océanos.