El valor es incluso superior al proyectado por Petrobras cuando anunció los recortes y el cambio en su política de precios de combustibles, el último día 16. La caída acumulada desde entonces es de 4,2%, o R$ 0,23 por litro.
En ese momento, el valor de venta del producto por parte de la estatal se redujo en R$ 0,40 por litro. La expectativa de la empresa era que la transferencia llevaría el precio de venta en los surtidores a R$ 5,20. El gobierno montó un grupo de trabajo y abrió un canal de denuncias para intentar forzar la caída.
El movimiento es criticado por distribuidoras y estaciones de servicio, que afirman que no hay regulación de precios en Brasil y que la competencia traerá valores al precio justo. En una nota distribuida esta semana, las estaciones de servicio también señalan que otros factores influyen en los precios, como los biocarburantes y los costes logísticos.
También como resultado de los recortes en las refinerías, el precio promedio del diesel S-10 en las estaciones de servicio brasileñas cayó un 4%, o R$ 0,22 por litro esta semana, a R$ 5,24 por litro. Es el valor más bajo desde septiembre de 2021, en valores corregidos por inflación.
Desde el día 16, la caída acumulada en el precio del diesel S-10 es de 5,9%, o R$ 0,33 por litro. En este caso, la transferencia ya superó la previsión de Petrobras. La estatal esperaba que el diésel común alcanzara R$ 5,18 por litro. Llegó a R$ 5,17 esta semana.
Acompañando la caída de la gasolina, el precio del etanol hidratado cayó un 3,7%, o R$ 0,15 por litro esta semana, para R$ 3,84 por litro.
El gas de cocina, que también se redujo en las refinerías, se vendió, en promedio, a R$ 105,84 el cilindro de 13 kilogramos. Es una disminución del 2,6%, o R$ 2,88 por cilindro, en comparación con la semana anterior.
Los recortes de precios fueron celebrados por el gobierno y han sido utilizados como argumento para presionar al Banco Central a reducir las tasas de interés, uno de los principales objetivos del presidente Luiz Inácio Lula da Silva (PT) al inicio de su mandato.
Ítem con mayor peso en la composición del IPCA, la gasolina, sin embargo, volverá a ser presionada a principios de junio, con la entrada en vigor del nuevo modelo de recaudación del ICMS, que tiene una tarifa media de R$ 0,20 por litro superior a la actual, según cuentas del consultor Dietmar Schupp.
Fuente: Valor Econômico