Se estima que el proyecto tendrá una inversión estimada de 20 mil millones de dólares.
LOS TIEMPOS

La Paz | ANF
 
El embajador de Brasil en Bolivia, Raymundo Santos Rocha, afirmó ayer que su país necesita un estudio detallado sobre el Tren Bioceánico Central para tomar una decisión. Los inversionistas Alemania y Suiza confirmaron su participación e interés en la construcción de la megaobra y anunciaron reunirse el 22 de marzo en territorio nacional con representantes del país y delegados de Perú y Paraguay.
 
Sobre el tema, el diplomático brasileño afirmó que su país sabe que la propuesta del Tren Bioceánico Central es un proyecto muy grande, como lo dijo el presidente Evo Morales al calificarlo como el “Canal de Panamá” de América del Sur del siglo XXI.
 
A la pregunta: ¿qué falta para que Brasil tome una decisión?, Santos Rocha respondió: “Hay que dimensionar las cosas con un estudio bien detallado, tener conocimiento del proyecto, estudiar este proyecto (…). Para hacer cualquier proyecto grande como esto es saber las condiciones, cómo funcionaría financiera y técnicamente”, señaló el diplomático a ANF.
 
Santos Rocha dijo que, hace un tiempo, hubo una videoconferencia entre el personal del Estado de Brasil y los técnicos del Ministerio de Obras Públicas. “Hubo presentación lado a lado con preguntas técnicas, volvieron algunas respuestas con algunas contestaciones”, mencionó.
 
“Lo que hay que decir es que Brasil tiene interés en conocer proyectos de infraestructura de América del Sur y esto parte de un principio obvio. Si hablamos de integración, la integración física es la base de la integración de una región”, manifestó.
 
Señaló que en el Consejo Sudamericano de Infraestructura y Planeamiento (Cosiplan) instalado al interior de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) existe un equipo de trabajo sobre la integración ferroviaria y un subgrupo específico sobre el Tren Bioceánico Central.
 
El ministro de Obras Públicas, Milton Claros, dijo que el proyecto, del que inicialmente se planteó que parta  del puerto Santos de Brasil pasando por Bolivia hasta llegar a Ilo (Perú), podría ser modificado si el Gobierno brasileño no se adhiere a esta propuesta, de modo que involucraría de forma directa a Perú, Bolivia y Paraguay.
 
Se estima que el proyecto tendrá una inversión estimada de 20 mil millones de dólares.