A comienzo de junio se conoció que el grupo español DISA fue la empresa elegida por Petrobras para quedarse con la red de estaciones de servicio que la multinacional brasileña puso en venta en Uruguay durante 2019.
Hasta la fecha la concreción del negocio no ha sido anunciada públicamente por ninguna de las dos partes. De todas formas, fuentes del sector consultadas por El Observador indicaron que la operación comercial está cerrada y será oficializada próximamente.

El grupo español dio otra pista semanas atrás cuando solicitó registrar 17 marcas de productos y servicios, según consta en el boletín de la propiedad industrial publicado a fin de agosto por el Ministerio de Industria, Energía y Minería.

Las solicitudes fueron realizadas el día 23 de junio de este año por DISA Holding Energético S.L.U. En el pedido de registro está el logo y la marca del sello. Además en la lista figuran otras de productos y servicios como las de una tarjeta de beneficios (Tu Club DISA), DISA Shop, DISA Eco, DISAMax, DISA Renovables, DISA Energy (comercializa gas natural) y Electrolinera DISA.

El Observador se comunicó con la empresa española para consultar sobre los planes en el país, pero no obtuvo respuesta al cierre de esta nota. Petrobras anunció en abril de 2019 que ponía a la venta sus 88 estaciones de servicio. Fueron varias empresas las que presentaron ofertas, pero finalmente fue el grupo español el que tuvo la mejor evaluación. Hasta ahora las negociaciones han transcurrido con gran hermetismo.

El ingreso de este nuevo jugador coincide con una serie de cambios que el gobierno se plantea instrumentar en el modelo de la distribución y comercialización de combustible a nivel país. Una de las modificaciones plantea que exista un precio en las plantas de distribución mayorista de Ancap y un precio máximo de venta al público que fijará el regulador. Sin embargo, aun no está definido si la Unidad de Reguladora de Servicios de Energía y Agua (Ursea) tendrá alguna participación en la fijación de los precios en el medio de la cadena (bonificación de distribuidoras y estaciones).

El grupo DISA es originario de Islas Canarias y tiene más de 600 estaciones en España. La gran mayoría de esas estaciones están abanderadas con la imagen de Shell. Precisamente, Petrobras había comprado en 2005, por unos US$ 60 millones, esa red de estaciones a la multinacional Shell en Uruguay. Los españoles también adquirieron recientemente la energética PRIO en Portugal con 247 estaciones, una instalación de almacenamiento y una fábrica de biodísel, según informó la firma el pasado 21 de agosto.

El último gran movimiento en el mercado uruguayo fue hace ocho años, cuando la firma chino-argentina Bridas –que pertenece a la china Cnooc y a la familia Bulgheroni– compró la red de estaciones Exxon Mobil (Esso) en Uruguay. Esa operación también incluyó activos en Paraguay y Argentina.

En julio de 2019 la empresa Petrobras también dejó en manos del gobierno el negocio del gas por cañería. Según informó el entonces presidente Tabaré Vázquez, la brasileña entregó el 100% de MontevidegoGas y el 55% de Conecta. Ahora el gobierno busca un inversor para ese negocio.

En el proyecto de ley de Presupuesto, el Poder Ejecutivo queda facultado a otorgar de forma directa una nueva y única concesión para la construcción y explotación del gas por cañería durante 30 años, según establece el artículo 300 de la ley. Otro de los artículos establece que el Poder Ejecutivo podrá rescindir el contrato con MontevideoGas y con Conecta, una mera formalidad, ya que estas empresas pasaron a estar bajo la órbita del Estado. Actualmente, son gestionadas por un fideicomiso de la Corporación Nacional para el Desarrollo (CND) con la tutela de Ancap.

FUENTE: EL OBSERVADOR - URUGUAY