FUENTE: LOS TIEMPOS
Mediante un contrato de tipo llave en mano, el Ministerio de Obras Públicas Servicios y Vivienda encargó a JOCA, una empresa española de ingeniería y construcciones, que es ahora una sociedad, que elabore el estudio técnico de inversión y la construcción del tren ligero con material rodante de última generación a un costo de 504 millones de dólares en un plazo de tres años sobre 40,37 kilómetros con los siguientes tramos: Tramo 1: Sipe Sipe-Estación San Antonio (Cercado), cerca de 27,37 kilómetros.
Tramo 2: Cruce río Rocha Av. Sajama-El Castillo, 9,8 kilómetros.
Tramo 3: Estación San Antonio (Cercado)-Facultad de Agronomía UMSS, 5,26 kilómetros. Actualmente Cochabamba cuenta sólo con un servicio de ferrobús hasta Aiquile y la ruta hacia Oruro está inutilizada desde hace 15 años.
El tramo rojo tiene seis kilómetros desde San Antonio hasta la facultad de Agronomía, tendrá seis paradas de tres minutos y circularán tres trenes en 16 minutos de viaje que harán 173 viajes por día. El tramo amarillo sale de San Antonio y desde La Recoleta.
Lamentablemente, ingresará al río Rocha hasta El Castillo y seguirá hasta Sacaba, con 10 kilómetros, tendrá 14 paradas y trabajará con cuatro trenes que harán 134 viajes diarios en 28 minutos cada uno. El tramo verde, desde la estación hasta Sipe Sipe, tendrá 22 paradas en su recorrido de 27 kilómetros. Con cinco trenes, demorará 56 minutos y hará 155 viajes diarios. Digo lamentablemente porque creo que el río debe ser embalsado y si construyen una estructura metálica en un costado para el paso del tren, será todo un problema más adelante (prefiero decir mi opinión ahora que es tiempo). En total, funcionarán 12 coches con capacidad de 200 personas cada uno, 56 sentados y 144 parados y habrá 43 paradas.
Los tramos verde y rojo son reconstrucciones de las vías existentes y el tramo amarillo será nuevo. Los trenes ligeros tendrán una cabina de conducción en cada extremo y poseerán sistemas de localización con el puesto de mando central, sus motores son eléctricos y todos los controles, electrónicos que tienen sistemas de autodiagnóstico, de comunicación entre cabinas y filmación de las salas de pasajeros, refrigeración y calefacción. Se estima un flujo mínimo de 70 mil pasajeros día que puede duplicarse y la tarifa estaría entre 2,5 y 3,5 bolivianos para el tramo más largo. Éste es uno de los proyectos estratégicos para Cochabamba que parece tener todas las condiciones técnicas estudiadas. Por supuesto que su utilidad será de alto beneficio para nosotros. Mi primera duda reside en la dificultad de planificar idas y venidas sobre una sola trocha. Un tren ligero de esta magnitud debería fluir sobre dos vías.
La segunda duda está en los tiempos de desplazamiento, casi una hora para llegar desde Sipe Sipe hasta la estación central parece excesivo, además del número de paradas. Otra duda es si los proyectistas conocen que el flujo de pasajeros hacia y desde La Cancha, corazón económico, implica el traslado de bienes, cuando este tren ligero está pensado sólo para personas como los teleféricos paceños. La tercera pregunta tiene que ver con las externalidades de su construcción, en particular sobre el tráfico de los 340 mil vehículos existentes hasta 2016 y el comportamiento cultural de los conductores, que es uno de nuestros mayores males urbanos.
DUDAS TÉCNICAS Y AMBIENTALES Tramo sobre el río. El tramo amarillo ingresará en el Rocha, pero el río necesita ser embalsado. El autor sugiere que esto último se haga primero. Una sola trocha. ¿Cómo será posible coordinar viajes de ida y vuelta en una sola trocha? ¿Cómo se podrá abastecer la demanda de pasajeros que van y vienen de La Cancha con sus productos? Los vehículos tradicionales. Otra pregunta que queda es cómo será posible coordinar con los vehículos tradicionales que circulan en Cochabamba.
Mediante un contrato de tipo llave en mano, el Ministerio de Obras Públicas Servicios y Vivienda encargó a JOCA, una empresa española de ingeniería y construcciones, que es ahora una sociedad, que elabore el estudio técnico de inversión y la construcción del tren ligero con material rodante de última generación a un costo de 504 millones de dólares en un plazo de tres años sobre 40,37 kilómetros con los siguientes tramos: Tramo 1: Sipe Sipe-Estación San Antonio (Cercado), cerca de 27,37 kilómetros.
Tramo 2: Cruce río Rocha Av. Sajama-El Castillo, 9,8 kilómetros.
Tramo 3: Estación San Antonio (Cercado)-Facultad de Agronomía UMSS, 5,26 kilómetros. Actualmente Cochabamba cuenta sólo con un servicio de ferrobús hasta Aiquile y la ruta hacia Oruro está inutilizada desde hace 15 años.
El tramo rojo tiene seis kilómetros desde San Antonio hasta la facultad de Agronomía, tendrá seis paradas de tres minutos y circularán tres trenes en 16 minutos de viaje que harán 173 viajes por día. El tramo amarillo sale de San Antonio y desde La Recoleta.
Lamentablemente, ingresará al río Rocha hasta El Castillo y seguirá hasta Sacaba, con 10 kilómetros, tendrá 14 paradas y trabajará con cuatro trenes que harán 134 viajes diarios en 28 minutos cada uno. El tramo verde, desde la estación hasta Sipe Sipe, tendrá 22 paradas en su recorrido de 27 kilómetros. Con cinco trenes, demorará 56 minutos y hará 155 viajes diarios. Digo lamentablemente porque creo que el río debe ser embalsado y si construyen una estructura metálica en un costado para el paso del tren, será todo un problema más adelante (prefiero decir mi opinión ahora que es tiempo). En total, funcionarán 12 coches con capacidad de 200 personas cada uno, 56 sentados y 144 parados y habrá 43 paradas.
Los tramos verde y rojo son reconstrucciones de las vías existentes y el tramo amarillo será nuevo. Los trenes ligeros tendrán una cabina de conducción en cada extremo y poseerán sistemas de localización con el puesto de mando central, sus motores son eléctricos y todos los controles, electrónicos que tienen sistemas de autodiagnóstico, de comunicación entre cabinas y filmación de las salas de pasajeros, refrigeración y calefacción. Se estima un flujo mínimo de 70 mil pasajeros día que puede duplicarse y la tarifa estaría entre 2,5 y 3,5 bolivianos para el tramo más largo. Éste es uno de los proyectos estratégicos para Cochabamba que parece tener todas las condiciones técnicas estudiadas. Por supuesto que su utilidad será de alto beneficio para nosotros. Mi primera duda reside en la dificultad de planificar idas y venidas sobre una sola trocha. Un tren ligero de esta magnitud debería fluir sobre dos vías.
La segunda duda está en los tiempos de desplazamiento, casi una hora para llegar desde Sipe Sipe hasta la estación central parece excesivo, además del número de paradas. Otra duda es si los proyectistas conocen que el flujo de pasajeros hacia y desde La Cancha, corazón económico, implica el traslado de bienes, cuando este tren ligero está pensado sólo para personas como los teleféricos paceños. La tercera pregunta tiene que ver con las externalidades de su construcción, en particular sobre el tráfico de los 340 mil vehículos existentes hasta 2016 y el comportamiento cultural de los conductores, que es uno de nuestros mayores males urbanos.
DUDAS TÉCNICAS Y AMBIENTALES Tramo sobre el río. El tramo amarillo ingresará en el Rocha, pero el río necesita ser embalsado. El autor sugiere que esto último se haga primero. Una sola trocha. ¿Cómo será posible coordinar viajes de ida y vuelta en una sola trocha? ¿Cómo se podrá abastecer la demanda de pasajeros que van y vienen de La Cancha con sus productos? Los vehículos tradicionales. Otra pregunta que queda es cómo será posible coordinar con los vehículos tradicionales que circulan en Cochabamba.