Tras varios años, se inauguró la planta industrial de carbonato de litio, materia prima para la elaboración de baterías, en el Salar de Uyuni, Potosí. La inversión empezó con 100 millones de dólares en 2018, pero al concluir la obra las autoridades nacionales indicaron que el costo fue de 766,9 millones de bolivianos, es decir, más del precio inicial.