Los candidatos se trasladan a New Hampshire, donde Trump es favorito.
MARC BASSETS - ELPAIS.COM

La derrota del magnate y showman Donald Trump en Iowa resuelve el gran misterio de los últimos meses. Sí, Trump —el hombre que alardeaba de ganar siempre, lo que era la máxima garantía de que con él en la presidencia Estados Unidos volvería a ganar— es mortal. Su aura invencible, que irritaba y asustaba por partes iguales, se diluye tras perder en los caucus o asambleas electivas del lunes ante el senador por Texas Ted Cruz, un conservador ortodoxo que contó con el respaldo de la derecha cristiana.

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