diariamente, según estimaciones de “Energy Outlook 2020, publicado el lunes (14) por la compañía petrolera británica BP.

Incluso con el crecimiento de la producción de petróleo, la expectativa es que las energías renovables ganen espacio en la matriz energética brasileña.

BP predice que, en un escenario de rápida transición energética hacia una economía baja en carbono, el pico de producción de petróleo en Brasil se registrará a finales de la década de 2020. En el escenario de transición más moderado, denominado “business-as -normal ”, el pico se alcanzará a finales de la década de 2030.

En todos los escenarios asumidos por la compañía británica, sin embargo, la participación de las energías renovables en el mix de energía primaria consumida en el mercado brasileño crecerá rápidamente, del 15% en 2018 a entre el 32% (en el estado habitual) y el 54% (en tercer escenario, más agresivo de transición energética, denominado “cero neto”) en 2050. Las proyecciones no incluyen la fuente de agua.

El petróleo, por su parte, irá perdiendo relevancia paulatinamente en los tres escenarios, dejando de representar el 39% de la matriz en 2018 para limitarse del 7% al 28%, dependiendo de la velocidad de la transición.

La multinacional también proyecta que la energía nuclear será la segunda en crecer más rápido, entre un 3,4% y un 4,8% anual en el país. BP también cree que Brasil seguirá siendo uno de los mayores productores hidroeléctricos del mundo. La previsión es que la participación de la energía hidroeléctrica en la matriz energética nacional, que fue del 28% en 2018, esté entre el 21% y el 26%.

En el escenario de una rápida transición energética, BP predice que la producción de biocombustibles aumentará a más del doble para 2035, alcanzando el nivel de 1,3 millones de barriles / día. En el escenario más modesto, este nivel alcanza los 900 mil barriles / día en la década de 2040.

El economista jefe de BP, Spencer Dale, dijo hoy que cree en un crecimiento significativo de los biocombustibles en el país. "Brasil es Arabia Saudita para los biocombustibles", dijo, durante la presentación global del estudio, comparando el potencial brasileño en biocombustibles con el potencial árabe en el sector petrolero. "Esperamos estar allí [en Brasil] durante mucho tiempo", agregó.

BP asume como premisa un crecimiento del 1,7% anual de la economía brasileña entre 2018 y 2050, un nivel por debajo de la expansión esperada para el PIB mundial (2,6% anual). La expectativa es que el consumo de energía primaria en Brasil crezca entre un 60% y un 66% para el 2050 y que el uso de energía per cápita aumente alrededor del 50%.

A su vez, se espera que la demanda eléctrica se duplique con creces en 2050. La mayor parte del crecimiento de la demanda de energía primaria provendrá del sector industrial, seguido del sector del transporte. La participación de las energías renovables en la matriz eléctrica pasará del 17% en 2018 a entre el 45% y el 51%.

FUENTE: O GLOBO - BRASIL