Chile, un importador neto de energía, vio aumentada la cantidad de carbón de su matriz energética en la última década, obligada tras el fin de las exportaciones de gas natural desde Argentina.
TNS LATAM
 
El presidente chileno, Sebastián Piñera, anunció este martes el cierre de ocho centrales termoeléctricas en los próximos cinco años, en el marco de un plan de descarbonización de la matriz energética que busca lograr que Chile sea un país carbono neutral hacia 2050.
 
Leña para el carbón El plan considera el cierre de centrales que representan hoy el 20% de la capacidad energética instalada del país, en termoeléctricas ubicadas en las ciudades de Iquique y Tocopilla, en el norte, Puchuncaví, en el centro, y Coronel, en el sur de Chile.
 
Con esta decisión, "se estima que el nivel de emisiones del sector eléctrico en lugar de alcanzar los 30 millones de toneladas de CO2 equivalente por año será de 4 millones de toneladas de CO2eq por año", según datos aportados por el gobierno.
 
"Estos pasos que estamos a anunciando hoy son la forma concreta y real de trasformar palabras y compromisos en hechos y realidades", dijo Piñera, al firmar el acuerdo de cierre en la ciudad de Tocopilla, en el norte de Chile, donde el plan contempla el cierre de cuatro centrales termoeléctricas.
 
Tras el cierre de las centrales, habrá un plazo de cinco años en que éstas permanecerán en un "estado operativo de reserva" estratégica, en caso de ser requeridas por alguna emergencia o falta de suministro.
 
Chile, un importador neto de energía, vio aumentada la cantidad de carbón de su matriz energética en la última década, obligada tras el fin de las exportaciones de gas natural desde Argentina.