El resultado se debe al buen desempeño de los minerales y la agroindustria, informó ÁDEX.
EL COMERCIO

Las exportaciones peruanas mantuvieron la tendencia al alza por segundo año consecutivo. Al término del 2017, los envíos de productos locales sumaron US$44.058 millones, lo que significa un aumento interanual de 22,7% debido al buen desempeño del precio de los minerales y la agroindustria, informó la Asociación de Exportadores (ÁDEX).

El presidente de ÁDEX, Juan Varilias Velásquez, señaló que luego de varios años los números son positivos. Recordó que durante al cierre de los períodos 2014 y 2015 se presentaron caídas de -9% y -14%, respectivamente. Sin embargo, se revirtió el panorama en el 2016 con un 8% de crecimiento y en el 2017 con 22,7%. De esta forma, se logró superar el estimado de ADEX en 2,5%.
 
Varilias reiteró que para alcanzar la meta del gobierno de duplicar las exportaciones al 2021, el crecimiento no debe ser menor a 15% y los productos no tradicionales deben seguir diversificando sus mercados y presentaciones. A su vez, agregó que por su contribución a la formalización del empleo y a la recaudación del país, el crecimiento sostenido de los despachos con valor agregado se constituye en un reto que ahora se vuelve crítico.
 
“Según el informe ‘Perspectivas de la Economía Mundial del FMI’, EE.UU. crecería este año 2,3%; China, 6,6% y la zona euro, 2,2%. Sin duda, es el momento de aprovechar el crecimiento proyectado de nuestros principales socios comerciales”, sostuvo.
 
El presidente de ÁDEX indicó también que se debe seguir apoyando los esfuerzos para levantar las restricciones de acceso a otros mercados. Además, se deben propiciar mejoras de competitividad en los demás subsectores no tradicionales que presenten potencial exportador como los: químicos, madera y metal-mecánica. Allí, se tendrá que introducir nuevas tecnologías e innovación en productos.
 
También añadió, que actualmente hay un trabajo conjunto entre en el sector privado y público. Mencionó, que ADEX trabaja con el Mincetur, Minagri, Produce y RR.EE. para potencializar la presencia del Perú en el mundo y ayudar a que las exportaciones sigan creciendo.
 
MINERALES: FACTOR IMPORTANTE
 
Según un análisis del Área de Inteligencia Comercial de ADEX, las exportaciones tradicionales (US$32.364 millones) concentraron el 73,4% y crecieron 27,9% por los mayores envíos de cobre y oro. En tanto, las no traidicionales (US$11.693 millones) representaron el 26,6% del total y presentaron una tasa positiva de 10%.
 
En los envíos en bruto, los incrementos más significativos provinieron de los sectores petróleo y gas natural (54,1%), pesca tradicional (41,7%) –por los mayores volúmenes de harina de pescado (63%)- y minería tradicional (25,7%). Por su parte, el agro sufrió una contracción de 5,9%. Según el investigador principal del CIEN-ADEX, Marcel Ramírez La Torre, la mejora de la minería tradicional se explica fundamentalmente por el incremento en las cotizaciones internacionales (cobre y plata) más que por los volúmenes.
 
Los principales destinos de la oferta de materia prima peruana fueron China, EE.UU., Suiza, India y Corea del Sur, que juntos lograron una participación del 64,3%. Completan el ranking: Japón, España, Brasil, Canadá, Panamá, Alemania y Emiratos Árabes.
 
EXPORTACIONES CON VALOR AGREGADO
 
Las exportaciones con valor agregado (US$11.693 millones), presentaron una recuperación de 10% después de caer un punto porcentual durante el 2016 y 9 puntos en el transcurso del 2015. El año pasado, casi todos los subsectores mostraron crecimientos a excepción de la minería no metálica (-4,5%) y maderas (-4,4%). Los que más crecieron fueron pesca (17,3%), metal-mecánica (17,1%), siderúrgico y metalúrgico (16,8%), textil (15,5%) y agroindustrial (10,5%).
 
Ramírez La Torre precisó que a diferencia de años anteriores, el sector no tradicional mostró una mejora más diversificada a nivel de subsectores. Ello representa una fortaleza importante del desempeño exportador del año 2017, el cual debería mantenerse este año.
 
El subsector más importante por monto exportado fue el agropecuario-agroindustrial (US$5.106 millones). Sus partidas más importantes fueron: uvas frescas (variación de 2,4%), paltas (46,3%), espárragos frescos (-1%), arándanos (51,9%), preparaciones para alimentación de animales (40,8%), mangos frescos o secos, bananas y cacao en grano.
 
Los químicos (US$1.377 millones) tuvieron como sus partidas más relevantes el propileno, óxido de cinc, lacas colorantes, productos de etileno, hidróxido de sodio, alcohol etílico, carmín de cochinilla y neumáticos. Mientras que, la sidero-metalúrgica (US$1.149 millones) se incrementó en 16,8%.
 
La pesca para el consumo humano directo (US$1.056 millones) creció 17,3%. La pota, colas de langostino con caparazón, filetes de pescado y langostinos enteros congelados fueron sus principales productos; mientras que, las conchas de abanico cayeron 79,5%.
 
Las confecciones (US$873,925 millones) crecieron en 4,7%; mientras que, los textiles (US$395,624 millones), 15,5%. La minería no metálica sumó US$586,671 millones; el metal mecánico, US$525,978 millones; y maderas, US$120,986 millones. El principal destino de la oferta no tradicional fue los EE.UU., seguido de Países Bajos, Ecuador y Chile.