El gerente general del Banco Unión, Rolando Marín, anunció ayer que se realizará una reingeniería de "procedimientos y gestión”, como punto de inflexión tras el fraude financiero perpetrado por uno de sus empleados, Juan Pari.
FUENTE: PÁGINA SIETE

Aseguró que el desfalco de 37,6 millones de bolivianos no afectó en el crecimiento de la estatal. "A mediano y largo plazo obviamente se define una reingeniería en términos de procedimientos y de gestión de recursos humanos”, declaró el sucesor de Marcia Villaroel. Los préstamos y depósitos en el banco continúan por una parte y la cartera o el crédito que concede están en la misma línea, aumentando, lo que demuestra que la fortaleza de la financiera, en términos de operaciones, no ha sido afectada, aseguró.

La pasada semana en una entrevista con este medio, Pari afirmó que en el Banco Unión siempre hubo gente que sabía que estaba desfalcando dinero, pero que recién lo delataron para "cargarle” otros casos más de corrupción que hay en la entidad financiera, como "créditos falsos, problemas con tarjetas de créditos y estafa a la gente”. Sobre el tema, Marín dijo que esperará los informes de auditoría "concluyentes” y afirmó que el Banco Unión se encamina a la ejecución de sus proyectos de expansión mayor.

"Estamos en una auditoría en curso, es un proceso de investigación que va a dar lugar a un informe final. El banco ha sido la parte interesada en que se absuelva todo este siniestro”, afirmó. Sobre el hecho de que actuó solo en el desfalco, Marín anticipó que hay evidencias que reflejan que actuó en complicidad.

"No es evidente (que haya actuado solo), es una información falsa, y dentro de los mecanismos de control que existen para el manejo de material monetario se establecen controles duales. Éstos han sido sobrepasados”, informó. En su criterio, Pari hizo declaraciones públicas para intentar confundir a la opinión pública.