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La economía peruana comenzó el 2017 mostrando cierta debilidad en las cifras de crecimiento económico. Sin embargo, en los últimos meses la tendencia parece haberse revertido y comienza a mostrar mayor dinamismo. En este contexto, el Fondo Monetario Internacional (FMI) mantuvo hoy sus proyecciones de crecimiento para el Perú, en 2,7% para este año y 3,8% para el 2018. 

 

En julio el organismo multinacional recortó su pronóstico para nuestro país desde 3,7%; en línea con los débiles resultados de crecimiento mensual. En su último reporte del Panorama Económico Mundial (WEO, por sus siglas en inglés) que hoy presentó, el FMI prevé un rebote importante en la actividad el próximo año. Sin embargo, es menos optimista respecto a las proyecciones oficiales (4,2% para el 2018).

 

Estas cifras coinciden con las previsiones del Gobierno, que estima en una tasa de 4% las perspectivas de crecimiento para los próximos años.

 

El informe del FMI señaló que "acciones decisivas" para impulsar la gobernabilidad y combatir la corrupción permitirían al Perú avanzar en la "mejoría del clima de negocios y la inversión", lo que redundaría en un mayor crecimiento económico.

 

El economista Carlos Casas dijo que el optimismo sobre la economía peruana está en los próximos años debido a que se espera una mayor dinamización de la inversión pública, la puesta en marcha de nuevos proyectos de inversión, un mayor desarrollo de las asociaciones público-privadas (AAP) y una mejora en las expectativas empresariales.

 

"Las condiciones están dadas para crecer a un 4% en los próximos años. Creo que eso explica la decisión del FMI de mejorar la tasa de crecimiento del Perú a largo plazo", indicó Casas.

 

Por otra parte, también proyectó que el alza de la inflación durante este año sería de 2,7%, cerca del límite superior del rango meta que maneja el Banco Central de Reserva (BCR), de entre 1% y 3%.

 

Se espera que el próximo año el índice de variación de precios se modere y termine el 2018 en 2,3%.

 

Finalmente, en cuanto al mercado laboral, el FMI prevé que se mantenga relativamente sólido y el desempleo se ubique 6,7% de la fuerza laboral durante este año y el próximo.