Arce que se encuentra en Brasil dejó el cargo por problemas en su salud. Mario Guillén asume el ministerio y espera que sea por poco tiempo. Morales no prevé mayores cambios en la economía
FUENTE: EL DEBER

El presidente Evo Morales descartó cualquier incertidumbre para la economía nacional, tras la salida repentina y por cuestiones de salud, de Luis Arce Catacora, quien era el más antiguo de su gabinete. Mario Guillén juró ayer en el cargo, delante del primer mandatario, supliendo transitoriamente a Arce, quien estuvo en esa cartera por 11 años. Entre sus primeros retos está dar continuidad a las políticas económicas y agendar una reunión con el sector privado, a más tardar, la próxima semana. “Vamos a continuar con nuestras políticas económicas, seguridad en el crecimiento.

El equipo que ha trabajado con Luis Arce va a continuar, ya que su viceministro (Guillén) ha decidido asumir el cargo. Esperamos por corto tiempo. La economía está garantizada, porque nuestras políticas de nacionalización están totalmente garantizadas. No puede haber incertidumbre en la economía nacional”, manifestó el jefe de Estado en la población de Lava Lava, municipio de Sacaba (Cochabamba), durante su discurso en la entrega de una unidad educativa.

El jefe de Estado pidió a Arce “volver pronto” para poder reasumir “esta enorme responsabilidad”. Asimismo, lamentó que opositores especulen sobre la situación de salud de Arce y critiquen su salida del país. El sábado, Arce informó a la prensa, que su tratamiento tomará bastante tiempo y que pedía al presidente que le concediera licencia “para poder atender esta medicación, este tratamiento y estos estudios que tienen que hacerme en Brasil”. Posesión y privados Entre tanto, la nueva autoridad prometió defender el Modelo Económico Social Comunitario y Productivo que, según él, permitió a Bolivia alcanzar históricos niveles de crecimiento y aseguró que agendará una reunión con el sector privado que Evo Morales había comprometido hace dos semanas. “La reunión con los privados está en la agenda que tenía el ministro Arce. El sábado nos reunimos con él y hemos establecido que vamos a continuar con dichas agendas. Con diferentes cabezas, pero con la misma gente”, auguró Guillén.

En su discurso de posesión, realizado ayer por la mañana en Palacio de Gobierno, Guillén aprovechó para desear al exministro una pronta recuperación y con voz quebrantada, tachó de “opiniones tendenciosas” las declaraciones de los opositores políticos que criticaron la decisión de ir a curarse a otro país. “Con la salud no se juega. Cualquiera puede enfermarse”, mencionó. Durante su gestión, como viceministro de Pensiones, a Guillén le tocó encabezar la negociación de la nueva Ley de Pensiones que está vigente desde el año 2013.

A partir de esa normativa, se diseñó la Gestora Pública, que se hará cargo de las jubilaciones de los trabajadores bolivianos, en reemplazo de las Administradoras de Fondos de Pensiones, que supuestamente, concluirán su trabajo entre agosto y septiembre próximos. Esperan continuidad Por su parte, el presidente de la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB), Ronald Nostas, señaló que este cambio de autoridad no debería generar ninguna incertidumbre porque Guillén es un hombre de la línea de Arce. “Mayores cambios no creo que pasen.

Por varios años, ha sido viceministro del área; así que creemos que va a haber continuidad en la visión y, por supuesto, en la línea establecida por el modelo económico del Gobierno. Esperemos que se dé la reunión del Consejo Económico en la primera quincena de julio”, declaró. Destacó como “acertada” la decisión del presidente Morales de elegir a Mario Guillén como la nueva cabeza del sector económico estatal y señaló que apoyaría las decisiones que la nueva autoridad implemente y que puedan aportar al sector privado. El gerente del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), Gary Rodríguez, deseó una pronta recuperación al exministro de Economía y Finanzas, y dijo que espera que su ausencia sea temporal y que desde la distancia pueda monitorear el trabajo de su sucesor, a fin de garantizar el crecimiento de la economía nacional prevista para este año, de un 4,7% en relación al Producto Interno Bruto (PIB).