Las empresas argentinas emitieron durante el último año un total de US$ 18.625 millones en Obligaciones Negociables (ONs), cifra que representa el mayor volumen registrado en al menos una década. El repunte fue liderado por las compañías del sector energético, en particular las que operan en Vaca Muerta, y tuvo a YPF como la principal emisora del mercado local. De acuerdo con un informe de la consultora Econviews, el fenómeno también tuvo implicancias en la estabilidad cambiaria, aportando divisas al sistema financiero.
Luego de una desaceleración observada entre marzo y abril por la incertidumbre previa al acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, la colocación de deuda corporativa recobró fuerza. Una característica distintiva del ciclo 2024-2025 fue el predominio de emisiones en dólares, que representaron el 81,4% del total. Las ONs en pesos alcanzaron el 11,4%, las dollar-linked el 6,7% y las ajustadas por UVA apenas el 0,4%. Las empresas energéticas lideraron las colocaciones para financiar proyectos vinculados a Vaca Muerta. Además de YPF, otras firmas como Pampa, Vista, Pluspetrol y Pan American Energy se destacaron entre las principales emisoras. Por volumen, el sector financiero ocupó el segundo lugar, con entidades como Banco Galicia, Macro, Supervielle y BBVA a la cabeza.

Según Econviews, el desempeño de los bancos mostró un mayor protagonismo de las ONs en sus esquemas de fondeo. A comienzos de año, el Banco Central autorizó a las entidades financieras a otorgar préstamos en dólares siempre que el financiamiento proviniera de ONs y no de depósitos, ampliando así las herramientas de crédito para el sector privado.

El tercer lugar lo ocupó el rubro de servicios, con una participación relevante de Telecom. En menor medida, también emitieron ONs empresas de los sectores inmobiliario, industrial, agropecuario y comercial, que en conjunto no superaron el 5% del total colocado. El auge de estas emisiones también se explica por factores macroeconómicos. El blanqueo de capitales impulsado en 2024 atrajo una cantidad significativa de dólares al sistema, lo que incrementó la demanda por instrumentos en moneda extranjera. Además, las restricciones cambiarias motivaron a las compañías a recurrir a las ONs como vía para hacerse de divisas sin salir del mercado oficial.

Esta estrategia permitió a varias empresas emitir deuda a tasas bajas en comparación con los bonos soberanos. También se vio favorecida por la exclusión del sector público de los mercados internacionales, lo que dejó mayor espacio para las compañías privadas en la captación de financiamiento externo.

El BCRA tuvo un rol relevante al permitir a los bancos canalizar préstamos en dólares fondeados con ONs. A su vez, la liquidación de estas emisiones en el Mercado Único y Libre de Cambios (MULC) contribuyó a estabilizar el tipo de cambio. Según datos oficiales citados por Econviews, la oferta neta de divisas en el MULC alcanzó los US$ 4.826 millones en el primer semestre de 2024. La mejora de las condiciones en Vaca Muerta también fue clave. Según Moody’s, la producción no convencional creció 28% interanual en 2024, apalancada por menores costos, mayores inversiones y la finalización de obras clave. Entre ellas figuran el Proyecto Duplicar de Oldelval, la terminal de Oiltanking y el oleoducto Vaca Muerta Norte, que elevaron la capacidad de transporte de 220.000 a 540.000 barriles diarios.

A pesar del crecimiento, Moody’s advirtió sobre desafíos operativos como la alta tasa de declino de los pozos. No obstante, los nuevos desarrollos permiten proyectar un nivel elevado de inversiones, con precios de equilibrio en torno a los US$ 40-45 por barril. En este contexto, las ONs seguirán siendo una herramienta clave para financiar los proyectos. De cara al segundo semestre de 2025, se espera que las empresas continúen accediendo al mercado de capitales local e internacional. Según Moody’s, las compañías ligadas a Vaca Muerta podrán seguir obteniendo financiamiento en condiciones competitivas gracias a la solidez de sus planes de expansión y la mejora en la infraestructura regional.

Fuente: Infoenergí