En medio de las constantes caídas de los precios del petróleo en el mercado internacional observadas en las últimas semanas, Petrobras anunció el jueves (7) que reducirá el precio del diésel A vendido en sus refinerías en R$ 0,27 por litro. La bajada, que entra en vigor a partir del sábado (9), representa un recorte del 6,6%. Se mantuvieron los precios de la gasolina y el gas de cocina, GLP.
En un comunicado, la estatal destacó que el ajuste fue resultado de análisis del mercado externo e interno en base a la estrategia comercial de la empresa, implementada en mayo de este año. La nueva formación incorpora ahora “parámetros que reflejan las mejores condiciones de refinación y logística de Petrobras en materia de precios”, afirma la empresa.

El precio del diésel A para los distribuidores pasó a ser de R$ 3,78 por litro. Según Petrobras, la estimación es que habrá una reducción de R$ 0,24 por litro para el consumidor final considerando la mezcla obligatoria de 88% diésel A y 12% biodiesel.

Para los consumidores, considerando otros factores como los impuestos, la mezcla de biocombustibles y los márgenes de beneficio de distribución y reventa, el precio del diésel A S10 debería alcanzar R$ 5,92 por litro, estima Petrobras. El cálculo considera el relevamiento de precios de los combustibles realizado por la Agencia Nacional de Petróleo (ANP) en la semana del 26 de noviembre al 2 de diciembre, que arrojó un valor promedio de R$ 6,16 por litro.

En lo que va del año, la caída acumulada en el precio de venta del diésel A de Petrobras a las distribuidoras es de R$ 0,71 por litro, equivalente al 15,8%.

“Consciente de la importancia de sus productos para la sociedad brasileña, la empresa reitera que al fijar sus precios busca evitar transmitir la volatilidad del mercado internacional y del tipo de cambio, preservando al mismo tiempo un entorno competitivo sano, de acuerdo con la legislación vigente”. , dijo Petrobras en una nota.

El ajuste anunciado ayer se produce casi dos meses después de la última vez que la estatal modificó el precio del derivado: el 21 de octubre, la compañía incrementó el precio del diésel en las refinerías un 6,58%. Ese mismo día, el precio de la gasolina bajó un 4,1%. La última reducción del precio del gasóleo promovida por Petrobras fue el 16 de mayo, con una caída del 12,72%.

El presidente de la empresa estatal, Jean Paul Prates, había dicho a Valor en Dubai que mantendría los precios del combustible hasta su regreso de la COP28. El ejecutivo llegó ayer a Río de Janeiro, donde sostuvo reuniones en la Cumbre del Mercosur. Prates señaló, en su momento, que había mayor posibilidad de un ajuste en las gasolinas que en el diésel.

Los analistas del mercado dicen que el recorte era esperado. Pero, para Ilan Arbetman, de Ativa Investimentos, la velocidad de ejecución fue sorprendente: “Hay una diferencia en los discursos entre realizar una reunión de precios al regresar y esta ejecución inmediata del recorte. Me parece que hay dos escuelas de pensamiento dentro de Petrobras y que Prates es de la línea más técnica. Mientras tanto, hay miembros del gobierno que hablan mucho sobre el precio de los derivados en el país”.

Para Arbetman, hubo consenso entre el ala técnica y la política para el reajuste del diésel: “El movimiento sigue siendo técnico, pero se hizo más rápido de lo esperado”.

Según el analista, hubo una variación en el margen de refinación del diésel que posibilitó la reducción del precio. Este margen determina la rentabilidad de la refinería.

Marcus D’Elia, socio de Leggio Consultoria, afirma que Petrobras apuesta por la tendencia de reducir el margen de refinación: “Esto podría generar una brecha mayor en relación a la paridad de importaciones en el corto plazo”.

El lunes (4), el ministro de Minas y Energía, Alexandre Silveira, dijo que volvería a preguntar a Petrobras sobre la posibilidad de reducir los precios de los combustibles, considerando las fluctuaciones del barril de petróleo y la variación del dólar.

En entrevista con GloboNews, Silveira dijo que respeta la gobernanza de Petrobras, pero afirmó que no renunciará a defender el interés nacional: “Creo que tenemos que llegar a Brasil, sentarnos nuevamente, hablar de precios. Esto será una constante, no será una novedad en la relación del gobierno con Petrobras, porque es importante para Brasil”.

A finales de noviembre, al presentar el plan estratégico 2024-2028, Prates afirmó que el presidente Luiz Inácio Lula da Silva “nunca” pidió a Petrobras que bajara o aumentara los precios de los combustibles.

En su momento, el ejecutivo de la petrolera afirmó que en ningún momento se sintió amenazado en su cargo, luego de que circulara la noticia de que su permanencia al frente de la estatal estaría amenazada.

Fuente: Valor Económico