Mientras los estacioneros y el Ente estatal avanzan en el proyecto de corredores verdes para carga de camiones y buses a GNC, especialistas del sector insisten con un planteo para que se brinde el marco legal que permita la adaptación de las expendedoras al transporte pesado.
Las fábricas de camiones en Argentina vienen desarrollando nuevas unidades movidas únicamente a GNC y en el marco de la reconversión de las flotas de transporte de carga y de pasajeros, las Estaciones de Servicio buscan estar a la altura de los nuevos desafíos.

“Los surtidores de alto caudal que permiten reabastecer de GNC a un camión en pocos minutos se fabrican en Argentina y se exportan a Europa y Estados Unidos con las normas de seguridad de esos países, por lo tanto, lo único que debemos hacer es adaptar esos requisitos para aplicarlos a nivel nacional”, dijo a surtidores.com.ar, el asesor en temas de GNC de Asociación de Expendedores de Mendoza, Enrique Fascioli.

En ese contexto explicó que “desde el ENARGAS se debe bajar una línea de acción que sea única para todas las distribuidoras que hoy en día actúan con sus propios criterios, hecho que impide un ambiente propicio para la reconversión de las Estaciones de Servicio de GNC con miras al suministro de vehículos pesados”.

Aseguró que la solución es simple en cuanto a normas se refiere, ya que se puede nacionalizar lo que ya se están aplicando en distribuidoras como ECOGAS, que permite la instalación de surtidores de alto caudal, bajo entrega de Certificado de Aprobación, adjuntando fotocopia de origen o Protocolo de ensayo del pico NGV1 que se importa de Alemania o EEUU.

Vale decir que dicho pico es el utilizado para carga rápida en camiones y admite un caudal de carga que es tres veces mayor que los comunes (NZ) utilizados en los automóviles.

Estos picos van de la mano con la cañería interiores del surtidor de alto caudal que en lugar de ¼ de pulgada de diámetro tienen ½ pulgada, lo cual permite mayor pasaje de fluido con altos estándares de seguridad.

La propuesta que menciona Fascioli, fue presentada oportunamente por COPIME (Consejo Profesional de Ingeniería Mecánica y Electricista) y está en estudio del ENARGAS. Consiste en que el organismo emita una resolución para que las distribuidoras acepten un mismo procedimiento basado en la norma 418 ya existente respecto del surtidor agregando el pico NGV 1, apto para la carga de GNC en camiones o colectivos, tal como se está realizando actualmente.

“En la medida que se brinde una seguridad jurídica que acompañe la reconversión de flotas pesadas que ya se está dando en el país, el negocio del GNC será mucho más redituable para Estaciones de Servicio, transportistas y para el Estado”, subrayó el especialista.

Fuente: Surtidores