Según las entidades, el texto supondrá un incremento del precio de la energía en al menos un 8% para los pequeños consumidores. Los grandes consumidores, como la industria, pueden tener hasta un 15% en el aumento del gasto energético, que eventualmente se trasladaría a los consumidores.
El texto ni siquiera agradó al gobierno federal. Fuentes económicas informaron al blog que consideran que el MP ha sufrido cambios que dificultan el ingreso de inversores privados a la empresa, además de impedir grandes inversiones en el sector energético.
El relator del texto, Elmar Nascimento (DEM / BA) afirmó que el nuevo texto presentado este martes ya contempla una serie de cambios negociados con los ministerios de Minas y Energía y Economía. Según él, los cambios en el MP original enviado no darán lugar a un aumento de tarifas.
“Al contrario, más recursos irán a la Cuenta de Desarrollo Energético (CDE), que ayuda a reducir la factura energética de los pequeños consumidores”, dice.
Uno de los mayores problemas del texto es la extensión de Proinfa (Programa de Incentivo a Fuentes Alternativas de Energía Eléctrica) por 30 años, lo que obliga a la empresa a contratar energía a valores superiores a las actuales pequeñas centrales hidroeléctricas ya instaladas, que no necesitaría disputar el mercado de la energía.
La contratación de energía de centrales termoeléctricas de petróleo y gas en regiones remotas del país y la construcción de gasoductos, como condición de privatización, también se señalan como rubros que llevarían a un incremento en el precio de la energía.
Parte de los montos que se recaudarán con la capitalización de la empresa se destinarán a una nueva empresa estatal, que incluiría a Itaipú y Eletronuclear.
Otros recursos se destinarían a inversiones en la cuenca del río São Francisco, que serán administradas por Codevasf; la empresa es hoy el foco de la investigación de un presupuesto paralelo del gobierno federal.
Fuente: O Globo