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se declararon este martes en estado de emergencia debido al bajo nivel de ventas de carburantes que conlleva a una crisis financiera nacional.

El sector pese al periodo de emergencia nacional y frente a la lucha contra el virus mortal, ha logrado, con esfuerzo operativo y económico, garantizar el suministro de combustible a todos los actores en esta coyuntura, servicios médicos, miembros de las fuerzas de seguridad y del ejército, abastecimiento de alimentos, entre los más importantes. Empero, hoy están al filo de la crisis.

“El bajo nivel de ventas nos ha producido una crisis financiera, donde hemos priorizado el pago de salarios ante cualquier otra obligación, por lo que hemos realizado dos importantes solicitudes a las autoridades de nuestro sector: Diferimiento del pago de la totalidad de las facturas por comercialización de GNV, de los meses marzo, abril y mayo, considerado el periodo de cuarentena y la eliminación de la multa por potencia no consumida de energía eléctrica, también de los meses marzo, abril y mayo; ya que la imposibilidad de venta no es por una decisión nuestra sino por la cuarentena que ingresó todo el país”, refiere un comunicado del sector.

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