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El artículo 3 señala que es derecho exclusivo del Estado la importación y exportación. Además marca que Ancap y UTE serán las encargadas de explorar y administrar en exclusividad.

 

Walter Verry, del Partido Colorado, señaló que “el presidente de la República ha convocado primero a los ex presidentes, de los cuales nosotros tenemos dos, a sentarnos alrededor de una mesa y discutir un nuevo marco para la eventualidad de que el Uruguay cuente con hidrocarburos”. “Ahora, yo me pregunto: si le vamos a sacar estas competencias a Ancap, si estamos pensando en crear un nuevo ente, ¿por qué le estamos dando hoy un monopolio?”, preguntó.

 

La oposición también criticó que se esté dando un marco regulatorio con la incertidumbre de la construcción de la planta regasificadora.

 

“Todos coincidimos, mi partido también, en que la posibilidad de impulsar un proyecto de una plata regasificadora era un proyecto factible, viable y que era bueno que el país se lo planteara”, reconoció el nacionalista Pablo Abdala.

 

“Después la lógica de los hechos determinó que el camino que se siguió fue un camino destinado al fracaso. Ese proyecto efectivamente fracasó, y tanto fracasó que la actual administración no ha querido reconocer esa realidad en todos sus términos y lo que viene haciendo son esfuerzos para disimular esa situación, para relativizarla. No quiero decir para esconderla, pero por lo menos para no asumir frente al país que evidentemente el camino que se escogió terminó por frustrarse o fracasar en todos sus términos”, opinó el legislador.

 

El artículo 3 declara “el derecho exclusivo a favor del Estado a la importación y exportación de gas natural cualquiera sea su estado de agregación”. Además señala que Ancap y UTE “serán las encargadas de explotar y administrar la exclusividad consagrada”.

 

El Frente Amplio justificó el marco regulatorio por el futuro de esta fuente de energía.

 

El diputado Carlos Varela dijo que “tener un marco legal que regule esta realidad y esa perspectiva nos parece razonable”.

 

Además señaló que la regulación es “la mayor certeza que le podemos dar a aquellos que se interesen en un proyecto”. “El razonamiento de que hay que esperar que las cosas pasen para después legislar no es el que a mí me parece más adecuado. Es más, nosotros mismos como gobierno hemos recorrido esa experiencia de tener que legislar de apuro porque algunas realidades nos estallan delante de nuestros ojos”, agregó.