Página Siete / La Paz
Un ranking elaborado por la consultora inglesa MoveHub revela que Bolivia tiene la segunda canasta básica de alimentos más cara de América Latina, según un artículo difundido en el portal de BBCmundo.
La firma es especializada en cuantificar los gastos de británicos que buscan vivir fuera del Reino Unido y elaboró un ranking de países a partir del gasto semanal que una familia de cuatro personas debe realizar para acceder a la canasta básica británica, que incluye carne, leche, arroz, pastas, papas, lechuga, tomates y frutas, presentes en la mayoría de los países.
La lista se basa en el porcentaje del salario promedio que necesita una familia en cada país para adquirir estos productos.
En todo el mundo, Uganda encabeza la tabla de los 122 países analizados. Un ugandés tiene que invertir un 275,86 % del salario medio nacional, es decir casi tres veces su valor, para hacerse con esta canasta básica.
En cambio, en la mayoría de los países desarrollados el porcentaje se sitúa por debajo del 10%.
En América Latina, los hondureños son los que más tienen que poner de su bolsillo (100,05%), seguidos de Bolivia (62,95%), El Salvador (49,98%) y República Dominicana (34,8%).
"Dado que no es posible encontrar una canasta básica universal debido a las diferencias idiosincráticas de las canastas nacionales, identificamos productos que se encuentran en las canastas de todos los países”, explicó Alexandra Yanik, del equipo investigador de MoveHub.
En el puesto 50, Panamá es el país de América Latina en el que el salario medio rinde más a la hora de acceder a los productos de la canasta básica.
Uruguay, Venezuela, Chile, Argentina, México y Cuba le siguen en ese orden, ya que requieren entre el 10 y el 20% del salario medio.
El acceso a la canasta básica es uno de los criterios primarios para definir la pobreza. Si bien la medición de MoveHub está construida a base de la canasta básica británica, los resultados de su ranking coinciden a grandes rasgos con la estimación de pobreza de la CEPAL en 2015.
Guatemala y Nicaragua no fueron medidos por MoveHub, pero países como Bolivia y El Salvador se encuentran entre los más pobres y también entre los que una canasta básica cuesta más.
Según Darío Rossignolo, economista de la Universidad de Buenos Aires y consultor internacional en políticas fiscales, este índice tiene limitaciones, pero puede dar una idea general no ponderada para una comparación.
"Si bien los productos de la canasta británica son parecidos a los de otras canastas, se precisaría una ponderación mayor de una serie de factores. Es decir, un producto puede tener una mayor incidencia en la canasta británica por una cuestión cultural o de estructura monetaria o de valorización de la moneda. Dicho esto, está claro que el factor salarial de la comparación es fundamental”, señaló a BBC Mundo.
El analista Jaime Pérez, de la fundación Jubileo, explicó a Página Siete que en Bolivia no se tiene un índice que mida el costo de la canasta básica de alimentos.
Además, aclaró que la realidad de Inglaterra es diferente y para una medición se debería analizar características de consumo y cuánto se gasta en cada país.
Políticas de control y subsidio de alimentos
Ahorro El control de precios en los mercados y la subvención de alimentos hicieron que cada familia pueda ahorrar 712 bolivianos en 2014, informó el Gobierno el año pasado.
Productos En el azúcar, con la intervención en el mercado, se logró economizar 32 millones de bolivianos y en la leche 325 millones.
Regulación Para regular el precio del pollo el Gobierno fijó precios tope y subvencionó los alimentos para las granjas avícolas, lo cual permitió un ahorro de 407 millones de bolivianos.
Harina Con la subvención al precio del pan, se logró que las familias economicen 936 millones de bolivianos, en 2014.
El año pasado la inflación de alimentos fue baja
El año pasado el promedio de precios de alimentos y bebidas no alcohólicas se incrementó en 2,21%. Esta tasa es inferior a la alcanzada en la gestión 2014, cuando la variación fue de 6,9%, y fue la más baja de los últimos seis años, según un análisis de la Fundación Jubileo.
Los precios de los alimentos consumidos en el hogar de acuerdo con el reporte del Instituto Nacional de Estadística (INE) bajaron -0,58% en diciembre, comparados con los precios registrados en noviembre.
Durante esa gestión, en tres oportunidades -marzo abril y diciembre- la variación del precio de los alimentos fue negativa, es decir que disminuyó.
Entre enero y diciembre de la pasada gestión, la variación promedio de precios del conjunto de bienes y servicios fue de 2,95%. Por tanto, el incremento del precio de alimentos de 2,21% fue menor al promedio general en -0,7 puntos porcentuales.
El analista Jaime Pérez, de la Fundación Jubileo, explicó que en comparación en Paraguay la inflación de alimentos fue de 0,48%, en Venezuela de 191% (datos a septiembre) y en Brasil Colombia y Argentina el índice llegó a más de dos dígitos.
Añadió que el otro criterio de análisis es la relación que se tienen con la línea de pobreza.
"El último dato que se tiene para medir la extrema pobreza es de 2014 y se tiene que el ingreso mínimo para comprar alimentos en el área urbana es de 401 bolivianos por persona mensual y el área rural de 315 bolivianos”, precisó.