Las transferencias se distribuyeron de la siguiente manera: USD 208 millones en royalties, USD 144 millones en concepto de cesión de energía y USD 47 millones destinados a la ANDE por utilidades y cargas administrativas. Solo en el mes de octubre, la Binacional transfirió USD 31,4 millones, de los cuales USD 19 millones fueron en royalties, USD 11 millones por cesión de energía y USD 1,4 millones a la ANDE.
Desde agosto de 2023 hasta octubre de 2025, Itaipú ya inyectó USD 1.159 millones al Estado paraguayo, monto que se desglosa en USD 580 millones en royalties, USD 472 millones por cesión de energía y USD 107 millones en pagos a la ANDE.
En entrevista con el canal GEN, El director general paraguayo de Itaipú Binacional, Justo Zacarías Irún, explicó que el ingreso que recibe el país por la cesión de energía irá disminuyendo naturalmente a medida que Paraguay aumente su propio consumo energético.
“Eso es algo muy bueno, deseado por todos los paraguayos, porque significa desarrollo. Si Paraguay consume toda su energía de Itaipú, quiere decir que se desarrolló. Y además se termina con esa vieja idea de que Paraguay vende su energía barata, porque ya no se va a vender más”, sostuvo. También aclaró que Paraguay no vende energía al Brasil, sino que Paraguay vende el derecho a usar la energía. “La potencia la contrata Brasil y le paga a Itaipú por esa energía, y le paga a Paraguay por el derecho de utilizarla. Y le sigue pagando muy bien, con un valor importante y coherente con la energía generada”, acotó.
El titular de Itaipú también se refirió al impacto del cambio climático y la variación del caudal del río Paraná en la generación de energía. “La Itaipú no puede controlar el caudal del río ni el comportamiento climático. A veces llega menos agua, y eso hace que se genere un poco menos de energía y, por lo tanto, un poco menos de ingresos. Sin embargo, seguimos dentro de lo presupuestado”, indicó. Recordó que en décadas pasadas los caudales eran de 10.000 a 13.000 m³ por segundo, e incluso llegó a observar 42.000 m³/segundo en épocas de crecida. “Hoy, cuando al río le llegan 8.000 o 9.000 m³ por segundo, ya es para soltar bombas”, comparó.
Pese a esa reducción, destacó que hace más de un año y tres meses no se abre el vertedero, lo que significa que toda el agua que ingresa se aprovecha al 100% para generar energía. “No sobra agua, no se libera agua, no se pierde agua. Toda la energía posible está siendo generada, y conforme al tratado se pagan los royalties, la compensación por energía cedida y las cargas de administración”, explicó.
Fuente: Hoy
