Los inversores siguen de cerca un posible aumento de la producción de materias primas por parte de la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus aliados (OPEP+), así como el escenario geopolítico en Oriente Medio.
En el Intercontinental Exchange (ICE), el Brent para septiembre subió un 0,55 % (0,37 USD), hasta los 67,11 USD por barril, mientras que el petróleo WTI para agosto, cotizado en la Nymex, cerró con un alza del 0,52 % (0,34 USD), hasta los 65,45 USD por barril. En medio de la incertidumbre sobre las políticas comerciales y fiscales de EE. UU., el dólar ha oscilado entre ganancias y pérdidas, lo que ha impulsado el aumento de los precios del petróleo.
Para Price Futures Group, el petróleo también se beneficia de una buena demanda estacional, que compensa parcialmente la pérdida de la prima de riesgo geopolítico, mientras se mantenga el alto el fuego entre Israel e Irán. Ayer, la lectura de S&P Global, en colaboración con Caixin, mostró que el índice de gerentes de compras (PMI) del sector manufacturero de China subió de 48,3 en mayo a 50,4 en junio, por encima de lo esperado por los analistas de FactSet.
El resultado por encima de los 50 puntos indica una expansión de la actividad, lo que aumenta las expectativas de una mayor demanda de petróleo del país. Sin embargo, según ING, las ganancias de la materia prima se ven moderadas por las expectativas sobre la decisión de la OPEP+ de aumentar la producción en agosto.
"Este aumento y un aumento similar en septiembre revertirían por completo los 2,2 millones de barriles diarios de recortes voluntarios y contribuirían a un superávit del mercado global en el cuarto trimestre", afirmó el banco holandés. Kpler cree que el cártel "parece estar en una trayectoria que podría inclinar el mercado petrolero mundial hacia una perspectiva bajista" y existe preocupación por un exceso de oferta de petróleo en el mercado. La institución también cree que las "tensiones comerciales no resueltas" también están influyendo a la baja.
Fuente: Dow Jones Newswires