Petrobras estudia oportunidades para importar y , según confirmó Álvaro Tupiassu, gerente ejecutivo de gas y energía de la empresa. El anuncio se dio durante un seminario del Instituto Brasileño de Petróleo (IBP) en Río de Janeiro.
Tupiassu destacó que la visión de la compañía brasileña es actuar como agente en el mercado, aprovechando nuevas ofertas de gas. Sin embargo, aclaró que las operaciones no se concretarán en el corto plazo debido al aumento de la demanda argentina en invierno. Brasil ya importa gas argentino a través de empresas como TotalEnergies, Pan American Energy, Tecpetrol, Pluspetrol, Pampa Energía y comercializadoras como Matrix Energia . Estas operaciones se realizan en colaboración con YPFB, la estatal boliviana dueña de los gasoductos que conectan ambos países. El gas de Vaca Muerta está transformando el mapa energético de la región. Con una producción en auge, Argentina está desplazando a Bolivia como principal proveedor de gas natural en Sudamérica. Mientras Bolivia enfrenta una caída en su producción, Vaca Muerta consolida su posición. Petrobras ya mostró interés en el shale gas argentino, y empresas como TotalEnergies y Eneva avanzan en estrategias para aumentar las exportaciones. Según datos oficiales, Bolivia pasó de producir 60 millones de metros cúbicos diarios en 2014 a apenas 28 millones en 2025.

La falta de transparencia en proyectos como Mayaya ha generado escepticismo sobre una posible recuperación boliviana. En contraste, Argentina sigue sumando inversiones y acuerdos para potenciar su producción, consolidando a Vaca Muerta como la gran apuesta regional. Actualmente, el gas argentino llega a Brasil a través de ductos operados por YPFB. Sin embargo, Tupiassu señaló que, si crece la demanda, podría ser necesario desarrollar nueva infraestructura, como una conexión directa por el sur. TotalEnergies ya negocia con Argentina y Bolivia para ampliar la capacidad de medición de gas, pasando de 2 a 10 millones de metros cúbicos diarios. Además, avanza en proyectos de licuefacción para exportar GNL, lo que abriría mercados globales. Petrobras, por ahora, no lidera estos desarrollos, pero su interés en comercializar gas argentino marca un cambio estratégico. Si las condiciones lo permiten, después del invierno podrían concretarse nuevas transacciones. Bolivia enfrenta un declive irreversible en su producción de gas, mientras Argentina consolida su liderazgo. Con Vaca Muerta en expansión, Brasil busca diversificar sus fuentes de suministro, reduciendo su histórica dependencia del gas boliviano. El gobierno brasileño ya autorizó a Eneva a importar gas desde la Cuenca Neuquina, y TotalEnergies impulsa acuerdos para abaratar costos. El gas argentino no solo llegará por ductos, sino también como GNL en los próximos años. Este escenario refuerza la posición de Vaca Muerta como el gran polo energético del Mercosur. Mientras Bolivia lucha por reactivar su producción, Argentina y Brasil tejen una alianza que podría redefinir el futuro energético de la región.

Fuente: LMNeuquén