El presidente de H2 Perú asegura que el hidrógeno es la mejor alternativa para descarbonizar sectores donde la electrificación aún no llega. Las inversiones en energía limpia rompieron récords en 2024, y el Perú debe acelerar su transición.
En el marco del evento Perú Energía 2025, Daniel Cámac, presidente de la Asociación Peruana de Hidrógeno (H2 Perú), señaló que el país necesita adoptar con mayor urgencia soluciones energéticas limpias, y que el hidrógeno puede ser la respuesta para sectores que dependen del diésel, como la minería o el transporte pesado.

“El hidrógeno y sus derivados emergen como la alternativa para sustituir el diésel en sectores de difícil electrificación”, afirmó. Actualmente, el diésel representa el 31% de la demanda energética nacional, lo que lo convierte en un reto para la descarbonización.

A nivel mundial, las inversiones en tecnologías de transición energética alcanzaron un récord de US$2.1 billones en 2024, superando a los US$1.8 billones de 2023. Según Cámac, en América Latina, Brasil lidera el camino, aunque el avance en el continente aún es más lento comparado con Europa o Asia.

Además de energías renovables como la solar y la eólica, también crecen las inversiones en captura de CO₂, electrificación de procesos y hidrógeno verde. De hecho, se estima que para el 2050, el hidrógeno podría contribuir con un 12% de la reducción total de emisiones a nivel global.

Fuente: Minart