Esta semana comenzaron a surgir en el mercado interrogantes sobre la capacidad de la industria nacional para atender el importante crecimiento de la demanda de biodiésel esperado en Brasil en los próximos años.
El aumento del consumo proviene de la combinación de la contratación de plantas termoeléctricas de biodiésel previstas en la subasta de reserva de capacidad y del aumento de la mezcla del biocombustible con el diésel al 15%. El director general de Aneel, Sandoval Feitosa, reconoció que hay dificultad para mantener los stocks de biodiésel en los volúmenes previstos para abastecer las plantas que serán contratadas en la subasta.

El propio ministro de Minas y Energía, Alexandre Silveira (PSD), ya había expresado su preocupación por las plantas de diésel que competirán en el concurso con la promesa de conversión a biocombustible. La subasta de reserva de capacidad estaba prevista para junio, pero sus plazos fueron suspendidos debido a procedimientos legales. El gobierno aún está discutiendo las reglas, pero espera concretar la contratación en 2025. Asimismo, aún no hay una fecha límite establecida para la reanudación del aumento de la mezcla de biodiésel con diésel.

Previsto para marzo, el gobierno ha dado marcha atrás en el cronograma de aumento de la mezcla del 14% al 15% debido al aumento de los precios de los combustibles y aceites vegetales. La inflación es un tema delicado para el gobierno, en un momento en que el presidente Lula (PT) busca aumentar sus índices de aprobación.

Y es precisamente en este contexto que los importadores de combustibles señalan que los problemas en el suministro de biodiésel impactarían en los precios del diésel en los surtidores. Hoy, la industria nacional cuenta con una capacidad instalada de producción de 10.500 millones de litros de biodiésel al año en 58 plantas, concentradas en las regiones Centro-Oeste y Sur.

Según Abicom, sólo el aumento de la mezcla generará una demanda extra de 9.600 millones de litros de biodiésel, lo que corresponde al 91% de la capacidad instalada actual. El tema volvió a poner de relieve las discusiones sobre la liberación de las importaciones de biodiésel.

La compra de biodiésel en el exterior para atender el mercado interno está suspendida desde 2023, cuando la CNPE creó un grupo de trabajo para evaluar los efectos de la medida, atendiendo las demandas de los productores nacionales. En ese momento, el Ministro de Minas y Energía afirmó que la decisión era importante para no comprometer a la industria local.

Fuente: ejes