Petrobras eligió el estado de São Paulo para desarrollar el proyecto del centro de hidrógeno de bajas emisiones. Según la empresa, que cuenta con cuatro refinerías en el estado, aún no se ha confirmado la ubicación del hub, pero el principal objetivo “es brindar soluciones para la descarbonización de la industria local”.

“Además de las refinerías propias de Petrobras en el estado, que consumen hidrógeno, São Paulo se destaca como el principal polo industrial del país, con demanda potencial de industrias difíciles de descarbonizar, como la química y el cemento”, afirmó la empresa, en una nota enviada a la agencia Eje.

Las refinerías de Petrobras en São Paulo son: Refinería Paulínia (Replan), en Paulínia; Refinería Henrique Lage (Revap), en São José dos Campos; Refinería de Capuava (Recap), en Capuava; y Refinería Presidente Bernardes (RPBC), en Cubatão.

El proyecto del hub de Petrobras fue uno de los seleccionados en la convocatoria abierta por el Ministerio de Minas y Energía (MME), a finales del año pasado, para competir por recursos del Fondo Internacional de Inversiones en Clima – Descarbonización de la Industria (CIF-ID).

Según información obtenida por la agencia del eje, la Refinería de Cubatão no fue mencionada en el proyecto enviado a la convocatoria pública, pero aún está siendo analizada en los estudios de factibilidad del polo de hidrógeno de la estatal.

Entre los criterios de selección se analizó la capacidad de producción de la molécula asociada al uso industrial, la vinculación con los puertos y la madurez tecnológica de los proyectos, que deben estar listos para operar al 2035.

La convocatoria es un paso dentro del Programa Nacional de Hidrógeno (PNH2), que apunta a consolidar hubs de hidrógeno de bajas emisiones en Brasil hasta 2035.

Potencial de biometano y C02 biogénico

Una de las razones que llevó a la empresa a elegir São Paulo es la gran disponibilidad de biomasa en la región, especialmente de caña de azúcar. Hoy el estado es el mayor productor de Brasil, con 383,4 millones de toneladas en la cosecha 2023/2024.

Además del etanol, la biomasa de caña de azúcar es capaz de generar carbono biogénico que, junto con el hidrógeno renovable, sirve como materia prima para la producción de combustibles sintéticos, como el SAF (combustible de aviación sostenible) y el e-metanol (combustible marino verde). .

“La ubicación de este polo en São Paulo también es estratégica por la disponibilidad de infraestructura e insumos en la región, principalmente CO2 biogénico, que puede ser utilizado en la producción de combustibles sintéticos para el transporte marítimo y aéreo”, afirma la estatal compañía.

Petrobras mira hacia 2027, cuando comiencen a entrar en vigor los objetivos de descarbonización obligatoria del transporte aéreo internacional, en Corsia, y de los vuelos nacionales, en el ámbito del Combustible del Futuro.

En cuanto a la navegación, la expectativa es que Brasil lance, en mayo, una estrategia para incentivar los combustibles marítimos sostenibles, en línea con lo que definirá en abril la Organización Marítima Internacional (OMI).

Hoy, sólo Revap, en São José dos Campos, abastece el 80% de la demanda de queroseno de aviación en el mercado de São Paulo y el 100% en el Aeropuerto Internacional de Guarulhos.

Recientemente, la empresa también lanzó la convocatoria para la adquisición de biometano, cuyo objetivo inicial es mapear el mercado desde el punto de vista de la oferta. Las compras anunciadas tienen como objetivo cumplir con el mandato del 1% de biometano en las operaciones de gas natural por parte de productores e importadores, definido por la ley de Combustibles del Futuro.

La entrega comenzará en 2026, coincidiendo con el inicio del mandato.

Un estudio encargado por la Federación de Industrias del Estado de São Paulo (Fiesp) muestra que el estado tiene potencial para producir 6,4 millones de metros cúbicos por día o 2,3 mil millones de metros cúbicos por año de biometano, de los cuales el 84% proviene del sector sucroenergético.

Infraestructura existente y múltiples rutas de producción. El uso de la infraestructura existente también se considera otro factor importante para hacer viable el centro de hidrógeno, así como la ganancia de escala con una mayor demanda, que según la compañía dependerá “de los incentivos regulatorios y gubernamentales”.

Respecto a posibles rutas tecnológicas para producir hidrógeno bajo en carbono, Petrobras afirma defender cualquier alternativa que demuestre viabilidad técnica y operativa.

La biomasa en la región sigue siendo una gran oportunidad para la producción de biometano e incluso etanol, que puede utilizarse en la producción de hidrógeno de bajas emisiones, vía reformado y con captura y almacenamiento de carbono (CCUS).

“En este sentido, el estado de São Paulo tiene potencial tanto para producir hidrógeno a partir de electrólisis como para utilizar captura de carbono, biometano, entre otros”, dice la nota.

“Las diferentes rutas serán complementarias a la descarbonización de las refinerías de Petrobras, así como de otros sectores industriales, dadas las especificidades de cada segmento y los desafíos

Fuente: ejes