La alta productividad de granos en el estado es considerada la principal razón del impulso de la producción de etanol, que viene registrando sucesivos récords en las últimas cosechas, como en la temporada 2022-23 donde se cosecharon más de 52 millones de toneladas del cereal. La temporada 2023-24 es considerada la segunda mayor, pese a las adversidades climáticas y la reducción de superficie, en la que se produjeron alrededor de 43 millones de toneladas, lo que representa el 38% de la producción nacional.
Según datos del Imea y de Industrias de Bioenergia de Mato Grosso (Bioind-MT), la molienda de maíz para la producción de etanol también alcanzó un nuevo nivel, con un crecimiento del 37,9% respecto al año anterior.
En evaluación del consultor financiero Jeferson Souza, para la actual cosecha, el escenario para la producción de maíz es más prometedor que el año pasado.
Expositor de la quinta edición de la Reunión Técnica de Maíz, realizada por la Fundación de Apoyo a la Investigación Agrícola de Mato Grosso (Fundación MT), que tuvo lugar los días 28 y 29, en Cuiabá, Jeferson Souza observó que “el aumento de los precios del maíz combinado con una mayor La interesante rentabilidad hace que el escenario cerealista sea favorable para los productores de Mato Grosso”. Y añade: "Sin embargo, la decisión de ampliar la superficie para la segunda cosecha también dependerá de factores como las condiciones climáticas durante la ventana de siembra. Si las condiciones son favorables, es posible que veamos un aumento considerable del área cultivada con maíz en la segunda cosecha de 2024”.
Según la consultora financiera, la expectativa es que alrededor de 30 millones de toneladas de maíz se utilicen para la producción de etanol en 2025, alrededor del 25% de la producción nacional del grano.
Las inversiones en industrias refuerzan el calentamiento
El escenario positivo en el mercado del maíz ha atraído grandes inversiones al sector. ALD Bioenergia Deciolândia, por ejemplo, anunció una inversión de mil millones de reales para triplicar su capacidad de producción en Mato Grosso hasta 2026.
“La empresa ve un gran potencial de crecimiento, tanto en el mercado nacional como en el exterior, impulsado por la creciente demanda de biocombustibles y la producción de DDG, un subproducto de la producción de etanol utilizado en la alimentación animal”, explicó el director ejecutivo de ALD Bioenergía Deciolândia, Marco Orozimbo.
Otras empresas del sector, como FS, también comparten el optimismo. La empresa pronostica un aumento significativo de la molienda de maíz para la producción de etanol el próximo año y destaca la importancia de seguir agregando valor al grano y al ecosistema agroindustrial.
“Cada año FS invierte en su capacidad de producción, por lo que siempre hay inversiones en cómo podemos producir más dentro de las optimizaciones de nuestras plantas. Y continuaremos el próximo año enfocados en estas optimizaciones, aumentando nuestra capacidad de producción y entendiendo el escenario futuro del mercado y evaluando si aceleramos o no nuestras expansiones”, afirmó el director comercial de FS, Víctor Trenti.
Sin embargo, es fundamental que los productores adopten una planificación estratégica para garantizar la rentabilidad de la producción. Pese a su optimismo, el productor rural Marcelo Vankevicius, que tiene una superficie aproximada de cinco mil hectáreas en Itiquira, prefiere mantener una postura más conservadora en relación a las inversiones.
“Tradicionalmente, nuestra producción no se centraba en híbridos de maíz de alto rendimiento. Sin embargo, con el crecimiento de la demanda de maíz para la producción de etanol y el uso de DDG, estamos revisando esta estrategia. A partir de ahora invertiremos más en cultivares de alto rendimiento e incluso consideraremos sembrar maíz fuera de temporada”, afirmó el productor.
Fuente: Noticias RPA