Los ingresos petroleros al Presupuesto General del Estado han aumentado en $6 millones hasta octubre de 2024 (0,4% más en comparación a 2023) y no en $111 millones como asegura el primer mandatario. El país cada vez produce menos, pero debido a los problemas en las refinerías locales, se ha podido exportar más crudo que no se puede procesar.

El 12 de noviembre de 2024, el presidente Daniel Noboa dio la bienvenida al nuevo ministro de Gobierno, José De la Gasca, con una publicación en su cuenta de X. En ese post, Noboa incluyó una lista de acontecimientos y logros que, según él, han ocurrido en el país durante los 11 meses de su gobierno.

Entre esos logros, el primer mandatario incluyó lo siguiente: «Hemos roto récords en el sector petrolero (el ingreso se incrementó de $45 millones en enero a $326 millones en octubre, que significan $111millones más)».

Sin embargo, según el Observatorio de la Política Fiscal, entre enero y octubre de 2024, se generaron ingresos petroleros total, que entraron al Presupuesto General del Estado (PGE), por $1.599 millones. Eso representó $6 millones más que los $1.593 millones registrados entre enero y octubre de 2023 (que ya fue un año en cuanto a ingresos petroleros).

Hace 10 años, los ingresos petroleros que llegaban al Presupuesto General del Estado (PGE) sumaban más de $3.300 millones. Si se mantiene la tendencia, en el mejor de los casos ingresaría al PGE un poco más de $1.700 millones hasta el cierre de 2024, es decir, casi 50% menos que en 2014.

En ese mismo periodo, la producción diaria de crudo se ha desplomado de 556.000 barriles a alrededor de 474.000 barriles.

Según el último reporte de la Agencia de Regulación y Control Hidrocarburífero, con corte al 13 de noviembre de 2024, la producción total de crudo en Ecuador llega a 474.120 barriles al día: Petroecuador (378.059 barriles diarios) y Privados (96.061 barriles diarios).

De acuerdo con el Banco Central del Ecuador (BCE), el promedio diario de la producción petrolera de Petroecuador ha caído de 401.400 barriles en enero de 2024 a 378.059 barriles en octubre de 2024.

Sin embargo, en términos porcentuales, la exportación de crudo Oriente creció en un 8,65% entre enero y septiembre de 2024, es decir, 3,8 millones de barriles adicionales respecto al mismo periodo del 2023, mientras que el crudo Napo aumentó en un 14,12%, o 4,4 millones de barriles.

Refinerías paradas liberan más petróleo para exportar Darío Dávalos, investigador en temas energéticos, explicó que el verdadero motivo detrás del incremento en el volumen exportado de crudo se encontraría en las dificultades técnicas de las refinerías Esmeraldas y La Libertad.

Esas refinerías han enfrentado paradas parciales por mantenimientos no programados y retrasos en el mantenimiento programado de unidades operativas en Esmeraldas.

«El crudo Oriente que no fue procesado en estas refinerías por la suspensión parcial de sus operaciones entre enero y septiembre de este año habría sido destinado a la exportación, pues el país no cuenta con suficiente infraestructura para su almacenamiento», acotó Dávalos.

Por otro lado, Dávalos también alerta que los problemas de mantenimiento en los motores de bombeo del Sistema de Oleoducto Transecuatoriano (SOTE) han impedido transportar todo el crudo Oriente disponible hasta Esmeraldas, obligando a Petroecuador a utilizar el Oleoducto de Crudos Pesados (OCP).

Esta operación implica modificar la calidad de esta materia prima al transformarla de crudo liviano a crudo pesado, o Napo, como es conocido en el mundo petrolero, lo que explicaría por qué hubo mayor cantidad para su exportación.

«Una conversión así habría generado una pérdida de $7,08 por barril, aproximadamente (diferencia entre el precio promedio del barril de crudo Oriente, $73,51, y el precio promedio del barril de crudo Napo, $66,43, en el período de análisis). Hasta la presente fecha, Petroecuador no ha aclarado esta situación», acotó Dávalos.

En conclusión, todo apunta a que el aumento en la exportación de crudo Oriente y de crudo Napo respondería a que una parte de esta materia prima no fue procesada en las refinerías La Libertad y Esmeraldas, debido a las paras no programadas, y a posibles cambios en la calidad del crudo transformándolo de liviano a pesado para su transporte desde la Amazonía hasta Esmeraldas a través del OCP.

Esto quiere decir que no hay ningún boom de producción como consecuencia de la gestión del Gobierno de Daniel Noboa, donde ya se ha tenido 4 diferentes gerentes de Petroecuador en menos de un año.

Fuente: La Hora