Los futuros del crudo Brent cayeron ligeramente 4 centavos para cerrar a 76,77 dólares el barril, mientras que el crudo estadounidense West Texas Intermediate cayó 13 centavos a 73,39 dólares el barril. Los pequeños cambios en los precios del petróleo se producen en medio de las hostilidades en Gaza, donde un ataque aéreo israelí alcanzó dos escuelas el domingo, lo que provocó la muerte de al menos 30 personas, según funcionarios palestinos. El ataque se produjo tras negociaciones infructuosas en El Cairo.
La región se encuentra en alerta máxima después de que Israel y Estados Unidos anticiparan una importante escalada en respuesta a las amenazas de Irán y sus aliados, Hamás y Hezbolá. Estos grupos han prometido tomar represalias por los recientes asesinatos del líder de Hamás, Ismail Haniyeh, y del comandante militar de Hezbolá, Fuad Shukr. Los analistas de ANZ señalaron que una intensificación del conflicto podría afectar las exportaciones de petróleo.
A pesar de las tensiones en Oriente Medio, el Brent y el WTI cayeron más de un 3% el viernes, alcanzando su punto más bajo desde enero. La semana pasada marcó la cuarta semana consecutiva de caídas para ambos contratos, la racha de pérdidas más larga desde noviembre.
A la presión a la baja sobre los precios del petróleo contribuyeron los temores de una recesión en EE.UU. y la decisión de la OPEP+ de mantener su calendario de eliminación gradual de los recortes voluntarios de producción a partir de octubre. El mercado había anticipado un posible retraso en esta eliminación, pero la OPEP+ decidió proceder según lo planeado. Una encuesta de Reuters indicó que la producción de petróleo de la OPEP aumentó en julio a pesar de los recortes de producción del grupo.
El número de plataformas petrolíferas operativas en EE.UU. se mantuvo sin cambios en 482 la semana pasada, según informó Baker Hughes.
Los datos económicos mundiales también afectaron los precios del petróleo, y los signos de una lenta recuperación económica generaron preocupaciones sobre la reducción del consumo de combustible. Datos recientes revelaron que la economía estadounidense añadió menos empleos de lo esperado, y los sectores manufactureros en Estados Unidos, China y Europa están lidiando con una demanda débil. Además, una disminución en el consumo de diésel en China, un importante motor del crecimiento de la demanda de petróleo, está ejerciendo presión a la baja sobre los precios mundiales del petróleo.
Fuente: udop