Nottus también advierte de un potencial aumento de incendios en el país y que La Niña debería tener una intensidad de débil a moderada
Abril debería ser un mes más seco de lo normal para el centro del país y superior al promedio en el Nordeste, lo que podría perjudicar la generación eólica. La probabilidad la afirmó este lunes 18 de marzo el especialista en meteorología empresarial Nottus. Otra previsión pertinente es que el otoño será más seco de lo habitual para la temporada, lo que podría empeorar el número de incendios respecto al año pasado.

Se espera un frente frío en las próximas semanas, que traerá un corredor de humedad, el último aliento del verano y luego una disminución gradual de las precipitaciones. En mayo el período debería ser más seco de lo normal en la parte central del país y superior al promedio para la región Sur, mientras que junio destaca buenas entradas para Santa Catarina, Paraná, São Paulo y el interior de Mato Grosso, pero sin alcanzar los niveles históricos. promedio. En general, las perspectivas son de neutralidad climática para otoño e invierno, con masas de aire polar avanzando más libremente sobre el continente y con mayores posibilidades de un descenso brusco de la temperatura. Esta configuración no implica estaciones más duras, ya que se espera que la primera ola de frío aparezca en la segunda quincena de abril.

La Niña débil a moderada

Según el modelo de la NOAA, la expectativa es que La Niña sea de débil a moderada. Y la posibilidad de que el fenómeno se configure aumenta en la segunda mitad del año, un 82% entre agosto y octubre, aumentando aún más este porcentaje para diciembre. “Aunque sea fuerte, no sentiremos los efectos hasta el año que viene, aunque empiece a formarse en los próximos meses. A la atmósfera le lleva un tiempo comprender que el océano ya no está caliente”, afirmó la meteoróloga de Nottus, Desirée Brandt, durante una rueda de prensa. Preguntado sobre la posibilidad de un otoño más cálido de lo habitual, el experto destacó que la temporada debería mantenerse dentro de la temperatura media, sin previsión de nuevas olas de calor. En cuanto al próximo verano y primavera, considera que hay que tener mucho cuidado, ya que hay previsión de La Niña, sin la configuración aún, pudiendo hacerse una mejor idea del comportamiento desde el momento en que se haga efectiva. . “Con un La Niña bien asentado a finales de año, difícilmente tendremos una primavera y un verano tan calurosos como los últimos”, añade.

Finalmente, la aparición del fenómeno, siguiendo sus niveles promedio de comportamiento, debería retrasar el período húmedo entre este año y 2025, impactando al mercado energético con volatilidad en los precios semanales y mensuales. “No son sólo las condiciones del Pacífico las que influyen en ello, sino también otras variables a corto plazo, como el océano Atlántico el año pasado”, añade el socio director y meteorólogo de Nottus, Alexandre Nascimento.

Fuente: Canal Energía