Promover un entorno de operación con una mirada más estratégica, previsible y con cumplimiento pleno del marco regulatorio, permitiría ampliar y fortalecer esta red de distribución de gas en todo el país para que la energía argentina llegue a cada rincón del territorio, así como también aprovechar al máximo el amplio conocimiento técnico de la industria del gas local. Camuzzi, con presencia a lo largo y ancho de 7 provincias, desempeña un papel crucial en la distribución de gas y muy especialmente en este ambicioso objetivo. Durante casi dos décadas - de 3 de historia que tiene la industria-, Camuzzi ha tenido que enfrentar la difícil situación de operar bajo un contexto de tarifas congeladas, lo que ha planteado desafíos considerables para poder garantizar la prestación de un servicio público esencial en condiciones de seguridad.
A pesar de las limitaciones desencadenadas por el sostenimiento de estas medidas a lo largo del tiempo, hemos logrado duplicar la cantidad de usuarios conectados y triplicar la extensión de nuestras redes e infraestructura, lo que demuestra la potencialidad y capacidad de crecimiento e innovación del sector de distribución en su conjunto. Además de una sustancial mejora en materia de divisas, la concreción del Gasoducto PNK dará también una amplia confiabilidad al sistema energético para los años venideros y un paso fundamental para la Argentina exportadora de GNL al mundo que todos anhelamos. Si a ello le sumamos el capital técnico y humano existente en la industria, el sector energético argentino tiene todo a su alcance para propiciar un escenario económico prometedor y de desarrollo sostenido. No obstante, para alcanzarlo, un primer punto de partida será reconocer que los costos operativos deben ser compensados a través de una estructura tarifaria justa y equitativa, que se sostenga en el tiempo.
De la misma forma, será necesario abordar las cuestiones macroeconómicas de manera integral para evitar volatilidades que impacten en el funcionamiento del sector y, en última instancia, en la calidad del servicio para nuestros usuarios. Son los propios usuarios los que han comprendido las complejidades y consecuencias que conllevan las fórmulas de tarifas congeladas. Por ello, y tras un largo recorrido, hoy hay un mayor consenso sobre la necesidad de normalizar tarifas para evitar mayores deterioros. Nuestro país cuenta con un sector maduro, saberes técnicos, sentido de pertenencia, compromiso por el servicio prestado. Con la combinación adecuada de recursos naturales, capital humano, y regulaciones efectivas, Argentina puede avanzar hacia un futuro energético más prometedor y sostenible, beneficiando a la nación en su conjunto.
Fuente: Ámbito