El ministro de Minas y Energía, Alexandre Silveira, afirmó este lunes (12/4) que el gobierno federal pretende regular las emisiones de metano en el sector del petróleo y del gas en los próximos años.
Los lineamientos serán propuestos al Consejo Nacional de Política Energética (CNPE) hasta 2024, y corresponderá a la Agencia Nacional de Petróleo, Gas Natural y Biocombustibles (ANP) completar el reglamento hacia fines de 2025.

Según el ministro, el esfuerzo por reducir las emisiones de CH4 en la industria petrolera brasileña incluirá la asignación, a través de la ANP, de subsidios del Mecanismo de Monitoreo, Comunicación y Verificación (MMRV). Silveira no comentó si el gobierno establecerá o no objetivos internos.

El anuncio se hizo en la Conferencia Ministerial sobre el Compromiso Mundial sobre el Metano, un evento COP28, que se celebró en Dubái. El titular del MME participó en la agenda junto a John Kerry, enviado especial de Estados Unidos para el clima.

Hace dos años, la Unión Europea y Estados Unidos firmaron el Compromiso Global sobre el Metano, con el objetivo de suplicar a la comunidad internacional que gobiernos y empresas intensifiquen sus acciones.

En un discurso este lunes, Silveira afirmó que la idea es proponer una regulación aunque “las emisiones de metano del sector energético sean muy bajas”.

El ministro recordó que Petrobras ya forma parte de la alianza para reducir las emisiones de metano en la industria del petróleo y del gas, Petroleum and Gas Mtane Partnership 2.0 – OGMP, coordinada por la ONU. El protocolo ha permitido a las empresas gestionar sistemáticamente sus emisiones de metano procedentes de operaciones de producción de petróleo y gas.

Además, Brasil se adhirió al Compromiso Global de Metano - “Global METANO Pledge”, con objetivos de reducción de las emisiones de metano para 2030.

Cargos al sector del petróleo y el gas

Durante las actividades de la COP28, Inger Andersen, directora ejecutiva del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente y subsecretaria general de las Naciones Unidas, exigió “compromisos sólidos” del sector del petróleo y el gas en relación con las emisiones de metano.

“Ahora necesitamos que el sector del petróleo y el gas haga promesas más firmes, las cumpla y acompañe la acción sobre el metano con una profunda descarbonización del sistema energético. Así es como el sector puede ganarse la confianza del mundo y adoptar nuevos modelos de negocio que le permitan seguir siendo rentable durante y después de la inevitable transición hacia una economía baja en carbono”.

Durante la COP28, 50 compañías petroleras se comprometieron a reducir las emisiones de metano a “casi cero” para 2030 y a cero emisiones de carbono para 2050.

Para Inger, la transparencia en la difusión global de datos relacionados con el trabajo de descarbonización será fundamental.

“Está claro que las empresas están diciendo lo correcto. Sin embargo, la producción prevista de carbón, petróleo y gas para 2030 es más del doble de los niveles compatibles con 1,5°C. Se necesitaría mucha gimnasia mental para que las compañías de petróleo y gas se convenzan de que están haciendo todo lo que pueden por el clima”, comentó.

En 2021, un informe de la AIE encontró que el metano era responsable de alrededor del 30% del aumento global de las temperaturas en el planeta. Muchas de estas emisiones son simplemente fugas a lo largo de la cadena de producción y suministro que los operadores no pueden capturar ni prevenir.

En 2020, las operaciones con combustibles fósiles fueron responsables de alrededor de 120 millones de toneladas de metano liberadas a la atmósfera, casi un tercio de todas las emisiones de metano procedentes de la actividad humana.

Fuente: Agencia epbr