Este es un punto de desacuerdo entre el equipo técnico de la agencia ambiental y Petrobras en la licencia del proyecto en Foz do Amazonas
El presidente del Ibama, Rodrigo Agostinho, dijo este jueves (31/5) que Petrobras partió de una premisa equivocada sobre el riesgo de que el petróleo toque las costas brasileñas.

Este es un punto de desacuerdo entre el equipo técnico de la agencia ambiental y Petrobras en la licencia del proyecto en Foz do Amazonas.

Es un tema incluso tratado en la solicitud de reconsideración realizada por Petrobras el 25 de mayo. En la carta, la empresa reafirma que “no hay probabilidad de tocar la costa, así como las formaciones biogénicas, que se ubican en profundidades de agua de hasta 200 m”.

La carta también menciona el trabajo realizado con las boyas, dotadas de sensores, y lanzadas al mar “para confirmar el comportamiento de las corrientes y del petróleo”.

"Petrobras también utilizó el 'estado del arte' para proyectar una eventual dispersión de petróleo en el mar en caso de accidente, según el Término de Referencia emitido por el Ibama (peor escenario). Se realizaron dos estudios, ambos aprobados por el Ibama”, dice la empresa en la solicitud de reconsideración, enviada el 25 de mayo al Ibama.

El mencionado “Término de Referencia” es la etapa de licenciamiento en la cual la agencia ambiental indica los lineamientos para el licenciamiento.

El punto planteado por Agostinho, en su explicación a los parlamentarios, es que con base en la premisa equivocada de Petrobras, el plan de respuesta es inadecuado, ya que no prevé acciones en respuesta al aterrizaje en la costa brasileña.

Rodrigo Agostinho participó este jueves (31/5) de una audiencia pública en la Cámara de Diputados (ver la sesión completa transmitida en vivo por el canal de YouTube de epbr en la parte superior del artículo).



¿Qué dice Rodrigo Agostinho?

“Hay una premisa que ha sido adoptada por Petrobras, que es que **no hay riesgo de que el petróleo toque la costa**. Estamos viendo una región llamada Mar Caribe. Una región que tiene tormentas tropicales, que tiene corriente del norte”.

Estos temas fueron tratados en los dictámenes internos del Ibama. El organismo reconoce la mejora en los datos del modelo de dispersión de petróleo, presentado por Petrobras en noviembre de 2022. Pero los técnicos dicen que, aun así, es imposible confiar plenamente en el estudio estadístico.

Este tipo de estudio sirve como base para formular el plan de respuesta a incidentes. Se hizo para otras regiones y no es exclusivo del licenciamiento ambiental.

“No estamos 100% seguros de que el petróleo nunca llegue a la costa. Si esto se ha puesto en los estudios, lo siento, es un error. Siempre tenemos que trabajar en el peor de los casos”, dijo el presidente del Ibama.

“Siempre hay que trabajar que en un momento determinado va a haber un accidente que no vamos a poder atender en el momento adecuado, que va a haber una tormenta, que va a venir una corriente más fuerte y que puede traer este petróleo a la costa".

Según él, esta premisa equivocada generó lagunas en el plan de respuesta.

“Entonces, esa fue una premisa adoptada por Petrobras en los estudios, diciendo que 'mira, los modelos dicen lo siguiente: nunca habrá petróleo en la costa, entonces no tengo que preocuparme por la posible contaminación de los manglares en esa región, con posible llegada de petróleo a la costa brasileña o incluso a la costa de Guyana'. Así que es importante para nosotros dejar todo eso claro".

A principios de mayo, la epbr ya había publicado este entendimiento de la agencia ambiental: incluso con el modelo de dispersión de petróleo presentado por Petrobras, internamente, los técnicos evalúan que el riesgo no se puede descartar.

En respuesta, Petrobras reafirmó que “no hay probabilidad de que el petróleo toque la costa brasileña”. Los estudios se presentaron en noviembre del año pasado, con datos y recursos actualizados.

“Con base en un análisis comparativo con otro modelo, realizado en 2015, se ratificaron los supuestos utilizados para la elaboración del estudio ambiental en su conjunto, así como los resultados alcanzados, que indican que no hay posibilidad de que el petróleo toque el Brasil costa”, dice la empresa.

La empresa también argumenta que la modelación fue aceptada por la agencia ambiental, que, de hecho, está incluida en el proceso de licencia pública FZA-M-59. El dictamen, sin embargo, también menciona que el estudio estadístico es insuficiente.

Petrobras se desmoviliza

Petrobras informó este lunes (29/09) que inició, como estaba previsto, la desmovilización de la plataforma y de los recursos destinados a la campaña de perforación en la FZA-M-59, tras la negativa del Ibama para el proyecto en aguas profundas de la Cuenca de Foz do Amazonas.

“Los trámites de desmovilización están en marcha y la plataforma podrá navegar en los próximos días hacia la región Sudeste, donde será destinada a otras actividades de la empresa”, informó la empresa en una nota.

La desmovilización había sido anunciada el 18 de mayo, tras la decisión de la agencia ambiental. El jueves (25/5), Petrobras presentó un pedido de reconsideración de la decisión.

La intención de la empresa era realizar un simulacro de una situación de emergencia, lo que fue desmentido por el Ibama, que juzgó que la actividad es inviable desde el punto de vista ambiental.

Tras confirmar la desmovilización, gobernadores de ocho estados emitieron una carta de apoyo al compromiso de Petrobras de perforar en el litoral de Amapá. El grupo es el Consorcio Interestatal Amazonia Legal.

Nuevo pedido tiene medidas adicionales Como medida adicional, Petrobras indicó al Ibama que ampliará la unidad de manejo de fauna en el aeropuerto de Oiapoque, en Amapá. Es una estructura para despetrolización de animales en caso de fuga. Un centro de este tipo fue instalado en Belém, Pará, base de operaciones de la campaña.

Según la empresa, la medida añade “otra alternativa para atender a la fauna”. Entre los cambios propuestos por la petrolera está el aumento de dos a 12 embarcaciones de emergencia y la reducción a menos de 24 horas en el tratamiento de los animales afectados por el petróleo en caso de fuga.

Petrobras enumera los siguientes recursos para responder a posibles incidentes en el plan de emergencia:

Doce embarcaciones, seis de las cuales para contención de petróleo, con una capacidad total de 8.900 m³, por encima del requerimiento de Conama de 6.400 m³; De estos seis, dos buques en espera junto a la plataforma para la recuperación inmediata de petróleo; y dos equipados con profesionales, contenedor climatizado y equipo de estabilización de fauna; Cinco aeronaves para vigilancia, transporte y salvamento aéreo; Cien profesionales especializados; marco nacional para la protección costera; articulación con países de la región; sistemas avanzados de contención de petróleo; sistema de bloqueo de fugas de pozos (llamado tapado); y una estructura específica de respuesta y coordinación de emergencias. Con el pedido, la empresa espera poder realizar una Evaluación Preoperacional (APO), un ejercicio simulado de respuesta a incidentes. Para luego obtener la licencia de perforación de la FZA-M-59.

Rodrigo Agostinho también afirmó que hubo una “mejora significativa” en la solicitud de reconsideración realizada por Petrobras. Dijo, sin embargo, que el material está siendo analizado por el equipo técnico y que no hay plazo para una respuesta.

“Reconozco esa mejora significativa desde el punto de vista del tiempo de respuesta, a partir de una serie de situaciones que se presentaron, pero obviamente la decisión sigue siendo técnica”, dijo Agostinho.

Fuente: epbr