Expertos del tema consultados por el medio especializado indicaron que el volumen no es grande y su impacto en el precio mundial del petróleo será mínimo. Sin embargo, destacaron que podría dar un impulso simbólico a Nicolás Maduro.
La administración del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, espera que el petróleo venezolano ayude a reducir la dependencia europea del crudo ruso y redirigir algunos de los cargamentos de Venezuela desde China. A juicio de dos de los entrevistados, la medida también trata de incentivar a Maduro para que reinicie las conversaciones políticas con la oposición de Venezuela.
Ambas compañías energéticas tienen empresas conjuntas con Pdvsa y podrán contar los cargamentos de crudo para saldar deudas impagas y dividendos atrasados, dijeron las personas.
Una de las personas consultadas destacó que una de las condiciones para este convenio es que el petróleo recibido “no se puede revender a otro lugar”, debe ir a Europa.
Una condición clave, dijo una de las personas, era que el petróleo recibido «tiene que ir a Europa. No se puede revender en otro lugar». Asimismo, indicó que la Casa Blanca no cree que la petrolera venezolana se beneficiará financieramente de estas transacciones sin efectivo, a diferencia de las actuales ventas de petróleo de Venezuela a China.
Hasta los momentos, China no ha firmado las sanciones occidentales contra Rusia y ha seguido comprando petróleo y gas rusos a pesar de los llamamientos de Estados Unidos.
Fuente: El Nacional