Según informó el director del área, Néstor Pi, “en el primer semestre del año 2021, se realizaron 319 inspecciones lo que marca un aumento considerable con respecto al primer semestre del 2020, en el cual se realizaron 158 inspecciones”.
Agregó que las fiscalizaciones “se concentraron en áreas no convencionales de centro de cuenca donde se registra la mayor actividad petrolera”. A modo de ejemplo mencionó Fortín de Piedra, Bajada del Palo Oeste, Aguada Pichana Este, Bajo del Choique, Bandurria Norte, Bandurria Sur, Bandurria Centro, Bajada de Añelo, Loma Campana, La Calera, entre otras. En lo que respecta a bloques de reservorios convencionales se focalizó en Chihuido de la Sierra Negra, Al Sur de la Dorsal y Al Norte de la Dorsal.
Detalló que las principales causas de inspecciones se “enmarcan en las leyes provinciales 1.926 y 2.453, donde se hace foco en el relevamiento y estado de instalaciones de tratamiento, primario o final de los hidrocarburos”.
El equipo técnico también se encarga de supervisar diferentes tareas: controlar puntos de mediciones fiscales de petróleo y gas, funcionamiento y buenas prácticas de equipos de torres y perforación de pozos, relevamientos de los sets de fracturas, y venteos de gas natural que se dirigen a la atmósfera y las causas.
A su vez, la Dirección General de Control Técnico Operativo forma parte del Comité de Emergencias del Plan de Respuesta a Emergencias con Impacto a la Comunidad (PREIC). A principio de mes se desarrolló un simulacro entre un vehículo particular y una unidad de transporte de combustible, con la hipótesis de la existencia de pérdida de fluido en zona urbana. El escenario se montó en Ruta 7, a la altura de la intersección con calle 24, bajada de los Patrios. Este tipo de simulacros se realiza una vez por año y los participantes se reúnen periódicamente para organizarlos.
Fuente: La Mañana de Neuquén