El descenso se produjo ante las medidas para combatir la proliferación del nuevo coronavirus.
Entre mayo y agosto, las ventas de combustibles acumuladas en el año cayeron más de un 8%, con una leve mejora en los meses siguientes.
El volumen vendido por los distribuidores fue el más bajo desde 2012, cuando las empresas vendieron 129,7 mil millones de litros.
El combustible con mayor caída en 2020 fue el queroseno de aviación, que cayó casi un 50%, como consecuencia de las restricciones de vuelo para reducir la circulación de personas, hasta los 3.500 millones de litros, el volumen más bajo de la serie histórica del regulador ANP, que se remonta a el año 2000.
Entre los combustibles más comercializados, la mayor caída se observó en las ventas de etanol hidratado, que cayeron un 14,6% a 19,2 mil millones de litros, el volumen más bajo vendido desde 2017 (13,6 mil millones de litros).
Las ventas de gasolina C que compiten con el etanol hidratado en las bombas cayeron un 6,1% en 2020 en comparación con el año anterior, a 35,8 mil millones de litros, el volumen más bajo desde 2011, cuando se vendieron 35,4 mil millones de litros.
Las ventas del diesel más consumido en Brasil, a su vez, se mantuvieron prácticamente estables, con un incremento del 0,3% en el período, hasta 57,5 mil millones de litros.
Fuente: Money Times