La principal es la inclusión de un capítulo que propone que las próximas subastas para la compra de energía termoeléctrica prioricen plantas térmicas inflexibles ubicadas a gas natural, es decir, para uso continuo en ubicaciones específicas.

El suministro, en este caso, debe ser preferentemente a los estados de la región amazónica. El objetivo, según el documento, es asegurar que exista demanda del insumo y, así, incentivar el desarrollo de este mercado.

“Solo con una demanda garantizada será posible viabilizar las grandes inversiones en oleoductos. A pesar de reconocer que existen varias actividades que pueden asegurar un consumo grande y constante de gas, como la química del gas, el acero, los fertilizantes y el transporte en autobuses y camiones, creemos que la actividad que mejor puede desempeñar este papel es la generación eléctrica ”, dice.

El reportero del texto en la Sala, Laércio Oliveira (PP-SE), se opuso a la medida que calificó de “tragedia”. Entre las otras enmiendas, está la garantía de que se mantendrán los poderes constitucionales de los Estados, que hoy se encargan de la distribución del insumo.

“Como la provisión de servicios de gas canalizado local es responsabilidad de los estados y las disposiciones del §1 del art. 25 no es muy precisa, consideramos conveniente suprimir el artículo para evitar que la futura regulación atente contra la competencia constitucional de los Estados en la distribución de gas canalizado ”, argumenta en el texto.

El informe también propuso una modificación al texto anterior para “garantizar los derechos y autorizaciones otorgados a los transportistas de ductos en proceso de implementación o licenciamiento ambiental el 5 de marzo de 2009”, cuando se aprobó la legislación vigente. La redacción anterior conservaba solo las clasificaciones de las tuberías que se estaban implementando.

LO QUE PROPONE EL TEXTO

El objetivo del proyecto es facilitar el ingreso de empresas a través de cambios en la forma de contratación, compartiendo estructuras existentes con terceros para pago y autorización de grandes consumidores para construir sus propios ductos.

El gobierno federal espera que los cambios en el marco regulatorio rompan el monopolio de Petrobras, atraigan competitividad al sector y, por ende, abaraten los insumos.

Fuente: Power 360