El complejo refinador, situado en la costa del estado Carabobo, se vio obligado a detener sus operaciones durante el fin de semana debido a fallas con una de sus válvulas.
Luego de años de casi paralizar las inversiones en la red de refinación de Pdvsa, que posee una capacidad de 1,3 millones de b/d, la producción nacional de combustible ha sido discontinua, reseñó Reuters.
Actualmente, además de El Palito, la refinería Cardón, con capacidad de 310.000 b/d de gasolina, es la única otra planta que mantiene la producción del carburante.
Entre septiembre y octubre del 2020 Venezuela recibió 3 cargueros con combustible provenientes de Irán. No obstante, luego de este proceso no se recibieron más importaciones del producto derivado del petróleo.
En consecuencia, los ciudadanos de Venezuela se han visto en la obligación de retomar las largas colas, que se evidenciaron a principios del año en curso y que se aliviaron con la llegada de los buques iraníes, para adquirir combustible.
Por su parte, Eudis Girot, director ejecutivo de la Federación Unitaria de Trabajadores Petroleros de Venezuela (FUTPV), indicó a mediados de esta semana que la gasolina iraní que había llegado al país, en meses previos, ya se agotó.
Asimismo, aseveró que la producción actual de la refinería Cardón es de 27.000 barriles por día, mientras que el Fraccionador Catalítico Fluidizado (FCC) produce 23.000 b/d de forma inestable, por lo que no hay garantías de que las operaciones se mantengan.
Fuente: El Universal