Del relevamiento realizado por empresas de servicios petroleros se desprende que a fines de julio había sólo 12 equipos de perforación en actividad, siete pertenecientes a Pan American Energy (PAE), dos a Shell, y uno a Exxon y CGC. El contraste con respecto a la situación anterior a la pandemia del COVID -19 es contundente, si se tiene en cuenta que en febrero pasado había 62 equipos de perforación en actividad. La recuperación de la actividad avanza lentamente: en mayo habían comenzado a operar cuatro equipos y en junio se habían sumados dos más.
En lo que respecta a las cuencas, de los 12 equipos que hoy están activos, 7 pertenecen a la Cuenca Neuquina y 5 a Golfo San Jorge. La caída de la actividad ya se había iniciado mucho antes de la pandemia, al observar que en agosto del año pasado eran 84 los equipos de perforación activos. Precisamente en ese mes el gobierno de Mauricio Macri había dispuesto el congelamiento del precio de los combustibles. A partir de ahí, el nivel de actividad cayó mes a mes, al llegar al tocar el piso pre-pandemia en enero de este año, con 60 equipos en actividad. En lo que tiene que ver con los equipos de workover, en julio estuvieron activos 19. Trece de ellos corresponden a PAE, e YPF, Vista Pluspetrol y Tecpetrol aparece con un equipo cada una. En este caso no se registró una caída tan abrupta desde el congelamiento de precios hasta el inicio de la pandemia.
En agosto eran 115 los equipos en actividad y en febrero de este año eran 105. Sumando los equipos de perforación y workover, son 31 los que están activos. Al desagregarlo por operadoras, 20 de ellos pertenecen a PAE y 3 a Shell y 1 a CGC, Exxon, Pluspetrol, Tecpetrol, Total, Vista, YPF y “Otras”. El caso de YPF es llamativo. En febrero del año pasado tenía en actividad 25 equipos de perforación y 59 de workover. En julio registra uno solo de workover. En el desagregado por compañías de servicios, DLS encabeza la tabla con 14 equipos en actividad. Las siguen PAE con 5, Quintana con 4, SAI con 3 y Ensing, HP, Nabors, Emepa y Tacker con 1 equipo cada una. Con respecto a las etapas de fractura, el informe revela que solamente dos compañías se encuentran activas.
En julio, PAE realizó 157 etapas mensuales y Chevron 44. Aquí también se observa el mismo patrón de caída en la actividad. En agosto del año pasado eran 945, en marzo de este año 604 y en julio 201. De todos modos, la caída fue mucho más abrupta en los no convencionales que en los convencionales. En el caso de los primeros, se pasó de 669 fracturas en agosto 2019 a 44 en julio pasado. En tanto que en el convencional, se registraron 221 en agosto del año pasado y 157 en julio.
Fuente: EconoJournal - Argentina