Admite que en este contrato se usará la misma fórmula de otros contratos con China, y explica que no se usan las que se han aplicado con Enap o Petroperú, pues la diferencia en que en este caso el trader está dispuesto a prestar un dinero al Estado.

¿Cómo avanza el contrato de venta de crudo a China que está atado a los $1400 millones de deuda?

Se han cumplido las partes jurídicas, los análisis de los informes. En los directorios hemos puesto incluso un voto razonado por cada informe. El asunto quedó en la cancha de Petroecuador, que ha estado recibiendo importantes noticias sobre premios. Así apareció una puja interesante. Ahora estamos ya con el último paso que es definir el premio, pero ahora está en la cancha de las empresas de China: Zhenhua, Petrochina y Unipec.

¿Cuáles fueron los argumentos de su voto razonado para aprobar esta operación?

Mi voto razonado tiene tres aspectos. El primero es la sobre oferta mundial de petróleo que es enorme y que ahora, en la apertura de la economía, debo proteger mi producción con contratos de largo plazo. También me alineo con la recomendación de Contraloría que dice hagan ventas de largo plazo y las spot también. La más importante razón es que hay que proteger los ingresos futuros.

Los contratos con China han sido perjudiciales, y existe la alerta de Petroecuador que habrá pérdidas. Frente a ello, el Gobierno hizo un decreto para que no sea prioridad la rentabilidad de la empresa sino el bien del Estado...

Ese es otro tema. Lo importante es entender que varios de los informes de Petroecuador, en los que hace la comparación entre venta de largo plazo y spot, no son correctos, no se puede comparar peras con manzanas. Que la venta spot es referencial, sí, pero la de largo plazo tiene características distintas. Dentro de esta largo plazo empezaron a competir entre tres y siempre buscaremos la mejor.

Usted ha dicho antes de ser ministro que los contratos con China fueron perjudiciales, ¿qué se está haciendo para no cometer el mismo error?

Es muy importante la transparencia con la que se está tratando el tema. Otra de las diferencia es que ahora no hay comisiones. Los dos contratos son separados: el Gobierno adquiere una deuda y debe pagar; por otro lado Petroecuador hace una venta. Visto en la integralidad, ambos deben ser beneficiosos para el Estado. El volumen está alineado con el monto del crédito.

En los contratos anteriores era enorme el volumen comprometido. ¿Puede confirmar cuántos millones de barriles aún tenemos comprometidos con China, pese a que ya terminamos de pagar la deuda? ¿Y cuándo terminaremos las entregas de crudo?

De lo que recuerdo, son 180 millones de barriles aún por entregar. No hay una fecha determinada. El calendario lo maneja técnicamente Petroecuador con base en la producción, el almacenamiento, que no haya demoras en los buques. Además tenemos un compromiso de 20 millones de barriles con Shell.

¿Se va a utilizar la misma fórmula que usábamos con los contratos con China que consideramos son lesivos, para este nuevo contrato?

La fórmula no era lesiva, el manejo de los números era el problema.

¿Entonces quién pone los números y cómo garantizamos que no nos perjudiquen?

El proponente pone los números, pero quien tiene que aceptar es Petroecuador, pero con licitación de las tres empresas. Vamos a escoger la mejor opción.

No es realmente una licitación, pues son tres empresas hermanas; pero en otros contratos de Gobiernos amigos, como con ENAP, Petroperú e inclusive PetroJam el precio se fija con venta spot más un premio. ¿Por qué no aplicamos estas mismas condiciones a China?

La pregunta está muy bien planteada. La respuesta es: deben haber los dos componentes. El trader debería tener también a intención de prestarle paralelamente al Gobierno. Esa es la razón de ser, es una operación conjunta: “yo te presto el dinero, pero te compro el petróleo”. En las circunstancias actuales, el ministro de Finanzas no debe tener la capacidad de endeudarse a esas tasas tan bajas, a esos periodos de gracia.

Entonces relajamos las condiciones porque necesitamos la plata. ¿Esa es la diferencia?

No relajamos. Están hechas de manera conjunta, sin que pierda ninguna de ellas su propia independencia, por un lado van las condiciones del financiamiento de la que se encarga Finanzas y por otro la venta de petróleo, a cargo de Petroecuador.

Otro de los problemas que había en los contratos del Gobierno anterior era que la cuenta que se abría en el CDB no era de libre acceso para el Ecuador. ¿Cómo se manejará ahora el dinero?

Petroecuador al igual que con China o Shell, debe abrir una cuenta para que ahí nos depositen. Ahora Petroecuador maneja la cuenta, toma los pago, los transfiere a Finanzas de acuerdo con la ley.

¿Cuándo se harán públicos todos los contratos con China? Se acaban de subir dos, pero faltan al menos tres contratos?

Recuerdo haberle escuchado al ministro Carlos Pérez que “no hay la información”. Esto debe cambiar. Todo esto debe transparentarse.

Fuente: El Universo - Ecuador