El nivel de aprovechamiento del mercado paraguayo de la energía de Itaipú Binacional se redujo en un 14,3% entre enero y marzo del presente año, según los datos divulgados el último fin de semana por las oficinas paraguayas de la entidad binacional.
ABC - PARAGUAY

Si comparamos la cantidad de energía, medida en GWh (1 GWh = 1.000 MWh) que retiró la ANDE de la usina binacional en enero (1.697 GWh) con la que retiró en marzo último (1.455 GWh) comprobaremos que el último suministro fue 242 GWh inferior al de enero.

El análisis comparativo de estas cifras permitirá igualmente saber que la tasa de aprovechamiento de febrero último supera a la de marzo en un 9,3%, o sea en febrero la empresa eléctrica estatal de nuestro país retiró 9,3% más, en números absolutos 150.000 MWh más en febrero que en marzo pasado. La binacional enfoca su información en el cotejo de las cifras que suministró en los tres primeros meses de este año, con las del año pasado, del 2017 y 2016 a la ANDE, razón por la cual sus conclusiones acerca de la importancia de la usina binacional en el mercado nacional son mucho más optimistas.

En efecto, al relacionar la cifra suministrada entre enero y marzo del actual ejercicio (4.757 GWh) con la apuntada en el mismo lapso del año pasado (4.311 GWh), concluiremos que en el primer trimestre del año en curso el índice de utilización de la ANDE de la producción de Itaipú fue superior en un 10,3%, 446.000 MWh más este año que en el año 2019, etc.

En la curva bajista Si comparamos las cifras atribuidas a la producción total de la central paraguayo/brasileña entre enero (8.176 GWh) y marzo (6.788 GWh) de este año, observaremos que también hubo una merma considerable: 1.388 GWh más en enero último, casi 17% menos. Si cotejamos la producción de febrero (7.297 GWh) con la de marzo (6.788 GWh), o sea 509 GWh más, concluiremos que la curva representativa de la producción de Itaipú se orienta hacia abajo, al menos en estos tres primeros meses del año, con probabilidades casi nulas de que se tuerza hacía arriba si consideramos la bajante del río Paraná, un fenómeno natural atenuado con el aprovechamiento de las aguas acumuladas en el embalse del gran complejo o desembalse, inclusive desde octubre del año pasado.

Recordemos que esta maniobra, denunciada como irregular y atentatorio contra los intereses nacionales por técnicos del sector Energía, sigue escondida en la bruma de opacidad que siempre rodeó las actuaciones de los administradores de turno de Itaipú, inclusive paraguayos.