La magnitud del desastre y las ganas de aportar han generado una confusión que duplica esfuerzos y los responsables de gestionar las donaciones explican a qué lugares llevarlas y qué insumos son la prioridad del momento.
EL DEBER

La generosidad del pueblo boliviano se hizo sentir en tiempos de desgracia, cuando el fuego arrasó con más de un millón de hectáreas de bosques, especialmente cruceños.

Lea la noticia>