Fuente: La Hora
A los problemas de producción del bloque 43, llamado ITT ( por los campos Ishpingo, Tambococha y Tiputini), estancado en los 63.000 barriles diarios, se añade el bajo desempeño del bloque 31, también ubicado en la zona del Parque Nacional Yasuní.
Si en el ITT la cantidad de agua por barril extraído es del 80% -de acuerdo con cifras oficiales-, en el bloque 31 la presencia de agua llega al 91%. Esto quiere decir que solo entre el 9% y 10% de lo explotado puede aprovecharse como crudo.
Esta situación ha provocado que, de acuerdo con la información de Petroamazonas, la producción de ayer haya cerrado en 7.639 barriles diarios, es decir, 80% por debajo de la meta de 25.000 a 30.000 barriles esperados cuando comenzó la explotación en 2013.
Carlos Pérez, ministro de Energía y Recursos Naturales no Renovables, reconoció los problemas de agua en los campos ubicados en la zona del Yasuní, pero aseguró que se está trabajando en la implementación de nuevas tecnologías como la llamada recuperación mejorada.
“Con eso, no solo que vamos a reducir y revertir la tendencia, sino que se va a ir aumentando el factor de recobro. La meta sería subir a que al menos el 30% de los barriles extraídos sean crudo, y solo el 70% agua”, dijo.
Según Petroamazonas, frente a los 7.639 barriles de crudo, producidos en el bloque 31, se deben reinyectar, a unos 7.000 pies de profundidad, 86.385 barriles de agua. Esto representa un costo por unidad de 0,2 dólares.
Fernando Reyes, integrante del Colegio de Ingenieros Petroleros, aseveró que las autoridades estaban advertidas de los problemas crecientes de agua, no solo en la zona de Yasuní, sino en el resto de bloques, desde hace más de 10 años, pero lamentablemente los correctivos no se han implementado con la rapidez y efectividad necesaria.
“En estos momentos es urgente que se realicen pruebas de laboratorio especializadas para buscar maneras de incrementar la viscosidad del crudo y disminuir la del agua. Con eso se puede sacar más petróleo por barril y detener la baja en la producción”, afirmó.
En este sentido, Pérez recalcó que la principal apuesta para salir del rango actual de 515.000 a 520.000 barriles diarios sigue siendo, a pesar del mejor desempeño del campo Sacha, el incremento de la producción en el ITT.
“Esperamos que en los próximos días, con la inclusión de la producción pendiente de Tambococha y Tiputini, podamos llegar, antes de fin de año a entre 532.000 y 534.000 barriles de crudo al día”, concluyó
Además, puntualizó que a pesar de las críticas, su objetivo siguen siendo los 700.000 barriles en 2021. “No me creen los economistas y son conservadores. Está bien. Voy a seguir trabajando para incrementar la producción”, aseguró. (JS)