El Gobierno considera que el crecimiento de la economía para este año superará el 4,5% y por ello se pagará este beneficio. La cifra oficial saldrá en octubre.
FUENTE: PÁGINA SIETE

El ministro de Economía, Mario Guillén, afirmó que la inversión pública, el incremento de precio de los hidrocarburos y la recaudación tributaria garantizan el pago del segundo aguinaldo para esta gestión. Sin embargo, la confirmación oficial a base de datos del INE se conocerá en octubre.

“El país creció en un 4,8% el segundo semestre del año pasado; además, este primer trimestre tenemos mejores números en el tema de recaudación impositiva, principalmente del IVA (Impuesto al Valor Agregado) por el mercado interno. Tenemos mejores números en el tema de inversión pública y estamos vendiendo más (hidrocarburos) a Brasil”, declaró la autoridad. El segundo aguinaldo, denominado Esfuerzo por Bolivia, es un beneficio que se paga a los trabajadores activos, públicos y privados, todos los años en los que el crecimiento del Producto Interno Bruto esté por encima del 4,5% (entre julio de 2017 y junio de este año), de acuerdo con el Decreto Supremo 1802/ 2013.

A inicios de junio, el ministro Guillén afirmó que el pago del segundo aguinaldo en la presente gestión es una “posibilidad cercana” porque el crecimiento económico en Bolivia superará el 4,5% que establece la norma para el pago del beneficio. Sin embargo, ayer, más seguro, dijo que este año hay un mayor dinamismo de la economía. “Uno se da cuenta que (...) el segundo semestre (de 2017) fue mucho más dinámico (porque se produjo) mucha más inversión; por lo tanto, creemos que (...) vamos a lograr un crecimiento de este año encima del 4,5%”, dijo.

Rechazo de los empresarios La anterior semana, el presidente de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), Marco Antonio Salinas, advirtió que entre un 80% y 85% de las empresas bolivianas tendrán dificultades para pagar el segundo aguinaldo de este año, si es que el Gobierno aprueba la cancelación de ese beneficio laboral.

“Tenemos un 2% de las empresas bolivianas que se llevan el 80% de la utilidad, y esas son las que pueden pagar; estamos hablando que un 80% a 85% de las empresas bolivianas van a tener dificultades en el pago del segundo aguinaldo”, declaró. A su juicio, existe una lectura “sesgada” en las autoridades de Gobierno, quienes casi confirman el pago del segundo aguinaldo con evaluaciones de cifras positivas de la economía, pero no toman en cuenta los “aspectos negativos”. Al respecto, Guillén afirmó que los empresarios “nunca” estuvieron de acuerdo con el pago del segundo aguinaldo. Explicó que cuando se anunció el pago en septiembre la excusa de los empresarios era que fueron comunicados con poco tiempo. Ahora que se anunció con varios meses de anticipación “tienen otros argumentos”. Luego afirmó que ya “les dijimos cuáles son las previsiones, prepárense”.

El mecanismo de redistribución Anuncio El 31 de diciembre del año pasado, el presidente Evo Morales expresó su deseo de que en 2018 se vuelva a pagar el doble aguinaldo, pues en el año que termina –dijo– Bolivia lidera nuevamente el crecimiento económico en la región. “Mi gran deseo, el próximo año (este 2018) ojalá habrá doble aguinaldo, aunque el campesino no goza de doble aguinaldo, pero creamos ambiente económico; ojalá el próximo año Bolivia siga siendo el primer país en crecimiento económico que no sólo sea de Sudamérica sino de toda América, ¿por qué no?”, dijo.

Política El ministro de Trabajo, Héctor Hinojosa, explicó la anterior semana que el doble aguinaldo es un mecanismo de redistribución de la riqueza en el país y adelantó que hay altas probabilidades de que este año se pague ese beneficio laboral. “El doble aguinaldo no es un mecanismo de privilegios, como algunos aseguran. Es un mecanismo de redistribución de la riqueza, un mecanismo que permite que los recursos que se generan sea redistribuidos a los trabajadores, porque los trabajadores no lo gastan en Miami o París, sino en el mercado boliviano”, dijo.