Fuente: El Mercurio
Los ministros de Energía de Argentina y Chile firmaron el protocolo definitivo de intercambio energético que servirá de marco legal a ambos países para implementar los también denominados swaps
El documento regula los mecanismos de traspasos de gas y electricidad entre las naciones, permitiendo establecer las “reglas del juego” que impidan, por ejemplo, que se repitan cortes de hidrocarburo desde el país vecino, como ocurrió la década pasada.
Este acuerdo permitirá los intercambios físicos de energía eléctrica y gas natural entre Chile y Argentina bajo ciertas condiciones.
Una de ellas será el suplir carencias temporales o estacionales del respectivo recurso en el país de destino.
También, cubrir la falta temporal de abastecimiento generado por situaciones de emergencia o calamidad pública.
Asimismo, el documento contempla el transporte de energía eléctrica o gas natural a través de las redes de ambos países, a fin de abastecer a zonas de un país que no estén directamente conectadas con el punto de origen de la energía en la misma nación.
Este protocolo, por ejemplo, facilitaría figuras como el suministro de gas natural desde el área de Vaca Muerta -una de las reservas de hidrocarburos más grandes del mundo, emplazada en Neuquén- hacia la zona del Biobío en Chile.
Lo anterior, sería luego compensado con una operación de suministro de gas natural regasificado en los terminales de Mejillones o de Quintero, ubicados en las zonas norte y centro de Chile respectivamente, y enviado hacia el principal centro de consumo de Argentina, es decir, la Provincia de Buenos Aires.
La apuesta de Argentina por fomentar la explotación de Vaca Muerta posibilitaría un mayor envío de gas natural al Biobío, debido a la necesidad de vaciar la producción de los nuevos yacimientos para seguir con la extracción.
Y ahí Chile juega un rol fundamental. Esto, porque el gasoducto que va desde la zona a Buenos Aires está a su máxima capacidad. Un mayor uso de gas permitiría también descontaminar comunas de la región intensivas en el uso de leña en hogares y el petróleo en la industria.
Envíos sumaron US$ 200 millones
Si bien hoy el Ministro de Energía, Andrés Rebolledo, firmará con su par argentino, Juan José Aranguren, el protocolo que creará un marco legal para los intercambios de gas entre ambas naciones, en 2016 y 2017 ya hubo pequeños envíos. En específico, desde Chile a Argentina, los que según estimaciones del mercado totalizaron unos US$ 200 millones en ambos ejercicios.
A fines de octubre, actuando Enap como articulador, se concretó el primer swap con Argentina.
La operación involucró el despacho desde Argentina de la capacidad que permitió al Terminal GNL Quintero operar sin contratiempos durante la mantención programada. Chile, en tanto, hizo un envío equivalente a las 48 horas siguientes. El movimiento fue por un volumen total de cuatro millones de metros cúbicos.