FUENTE: LA PRENSA
“Estamos preocupados porque el Gobierno arbitrariamente hace incrementos que afecta a la población y al sector obrero. Empezaron con la elevación en las tarifas de energía eléctrica y ahora con el gas industrial. Estas medidas nos afectan a todos porque habrá un efecto dominó en el precio de los alimentos”, dijo Camacho. El dirigente cobista manifestó que mañana la Central Obrera Boliviana (COB) tendrá un ampliado de emergencia en La Paz para analizar la situación y “sacar un pronunciamiento” que haga conocer la posición del sector obrero boliviano. “Como ente matriz de los trabajadores, vamos a pedir una explicación formal al Gobierno para que nos haga conocer el motivo del incremento en las tarifas del gas industrial”, manifestó. Por su parte, Mario Céspedes, secretario ejecutivo de la Federación de Fabriles de Cochabamba, deploró tanto al Gobierno como a los empresarios por sus posiciones en contra de la población. “Como sector fabril y ser parte del pueblo, hemos rechazado el incremento en las tarifas del gas industrial y el incremento de los productos finales”, indicó. Céspedes criticó al sector empresarial porque no se pronunció de la misma manera cuando hubo el incremento en las tarifas de energía eléctrica. “Hay buenos y malos empresarios.
Cuando subió el precio de la energía eléctrica, los industriales no dijeron nada. Pero ahora, con los nuevos precios del gas industrial, amenazan con subir sus precios finales, eso no está bien”, manifestó. En tanto, el secretario de Desarrollo Sustentable del Gobierno Autónomo Municipal de Cochabamba, Eduardo Galindo, indicó que, en reunión del gabinete económico de la Alcaldía, los miembros de este ente hicieron conocer su preocupación por las medidas económicas que ejecuta el Gobierno central contra el sector industrial y productivo del país. Galindo enumeró las acciones que hizo el Gobierno contra el sector empresarial: el pago del doble aguinaldo, el acoso del Servicio de Impuestos Nacionales a las empresas, el incremento en las tarifas eléctricas y del gas industrial. “Son medidas que no permiten que haya inversiones en el sector industrial. Estas medidas harán que se incrementen los precios de los productos finales y la población ya no comprará productos nacionales. Esto conllevará a que opten por comprar productos importados a menor precio.
Además se incrementará el comercio informal”, advirtió. El viernes, la Confederación de Empresarios de Bolivia (CEPB) calificó la medida como “irracional” y alertó sobre una contracción en la generación de empleos. Para el Gobierno es reducir la subvención El ministro de Hidrocarburos, Luis Alberto Sánchez, mediante un comunicado de prensa, justificó la medida indicando que la reducción a la “subvención” del gas responde a una política de redistribución de los recursos para que las familias de zonas rurales accedan al gas a un precio menor. Se divide a 1.092 empresas de la categoría industrial en cuatro segmentos. El segmento A alcanza a 220 empresas que tienen un consumo de hasta 20 mil pies cúbicos al mes (MPC/mes), con un precio de 1,86 dólares por MPC, lo que representa un incremento máximo del 9 por ciento. El segmento B afecta a 831 empresas que tienen un consumo de hasta 10.000 MPC/mes, donde el precio será de 2,10 dólares por MPC, con un aumento del 23 por ciento. El segmento C alcanza a 32 empresas que consumen hasta 30.000 MPC/mes, con un precio de 2,38 dólares por MPC, con un aumento del 40 por ciento.
Y el segmento D afecta a nueve empresas que consumen más de 30.000 MPC/mes, ellos tendrán un precio de 2,51 dólares por MPC, por lo que este segmento tendrá un incremento máximo de 48 por ciento. El viernes, el presidente de la Federación de Entidades Privadas de Cochabamba (FEPC), Javier Bellot, rechazó la normativa. En tanto, Antonio Fernández, presidente de la Cámara Departamental de Industria de Cochabamba, dijo que el sector industrial se declaró en emergencia.
“Estamos preocupados porque el Gobierno arbitrariamente hace incrementos que afecta a la población y al sector obrero. Empezaron con la elevación en las tarifas de energía eléctrica y ahora con el gas industrial. Estas medidas nos afectan a todos porque habrá un efecto dominó en el precio de los alimentos”, dijo Camacho. El dirigente cobista manifestó que mañana la Central Obrera Boliviana (COB) tendrá un ampliado de emergencia en La Paz para analizar la situación y “sacar un pronunciamiento” que haga conocer la posición del sector obrero boliviano. “Como ente matriz de los trabajadores, vamos a pedir una explicación formal al Gobierno para que nos haga conocer el motivo del incremento en las tarifas del gas industrial”, manifestó. Por su parte, Mario Céspedes, secretario ejecutivo de la Federación de Fabriles de Cochabamba, deploró tanto al Gobierno como a los empresarios por sus posiciones en contra de la población. “Como sector fabril y ser parte del pueblo, hemos rechazado el incremento en las tarifas del gas industrial y el incremento de los productos finales”, indicó. Céspedes criticó al sector empresarial porque no se pronunció de la misma manera cuando hubo el incremento en las tarifas de energía eléctrica. “Hay buenos y malos empresarios.
Cuando subió el precio de la energía eléctrica, los industriales no dijeron nada. Pero ahora, con los nuevos precios del gas industrial, amenazan con subir sus precios finales, eso no está bien”, manifestó. En tanto, el secretario de Desarrollo Sustentable del Gobierno Autónomo Municipal de Cochabamba, Eduardo Galindo, indicó que, en reunión del gabinete económico de la Alcaldía, los miembros de este ente hicieron conocer su preocupación por las medidas económicas que ejecuta el Gobierno central contra el sector industrial y productivo del país. Galindo enumeró las acciones que hizo el Gobierno contra el sector empresarial: el pago del doble aguinaldo, el acoso del Servicio de Impuestos Nacionales a las empresas, el incremento en las tarifas eléctricas y del gas industrial. “Son medidas que no permiten que haya inversiones en el sector industrial. Estas medidas harán que se incrementen los precios de los productos finales y la población ya no comprará productos nacionales. Esto conllevará a que opten por comprar productos importados a menor precio.
Además se incrementará el comercio informal”, advirtió. El viernes, la Confederación de Empresarios de Bolivia (CEPB) calificó la medida como “irracional” y alertó sobre una contracción en la generación de empleos. Para el Gobierno es reducir la subvención El ministro de Hidrocarburos, Luis Alberto Sánchez, mediante un comunicado de prensa, justificó la medida indicando que la reducción a la “subvención” del gas responde a una política de redistribución de los recursos para que las familias de zonas rurales accedan al gas a un precio menor. Se divide a 1.092 empresas de la categoría industrial en cuatro segmentos. El segmento A alcanza a 220 empresas que tienen un consumo de hasta 20 mil pies cúbicos al mes (MPC/mes), con un precio de 1,86 dólares por MPC, lo que representa un incremento máximo del 9 por ciento. El segmento B afecta a 831 empresas que tienen un consumo de hasta 10.000 MPC/mes, donde el precio será de 2,10 dólares por MPC, con un aumento del 23 por ciento. El segmento C alcanza a 32 empresas que consumen hasta 30.000 MPC/mes, con un precio de 2,38 dólares por MPC, con un aumento del 40 por ciento.
Y el segmento D afecta a nueve empresas que consumen más de 30.000 MPC/mes, ellos tendrán un precio de 2,51 dólares por MPC, por lo que este segmento tendrá un incremento máximo de 48 por ciento. El viernes, el presidente de la Federación de Entidades Privadas de Cochabamba (FEPC), Javier Bellot, rechazó la normativa. En tanto, Antonio Fernández, presidente de la Cámara Departamental de Industria de Cochabamba, dijo que el sector industrial se declaró en emergencia.