El director de la Agencia Boliviana Espacial (ABE), Iván Zambrana, aseguró ayer que si no se consolida la construcción de un segundo satélite de telecomunicaciones, Bolivia se verá obligado a alquilar nuevamente servicio del exterior.
FUENTE: LOS TIEMPOS

“Estamos trabajando en el proyecto Túpac 2, un satélite también de telecomunicaciones porque si no tenemos un satélite nuevo para cuando el Túpac 1 se llene, vamos a tener que alquilar satélites del exterior para atender la demanda del país, que no para de crecer porque somos un país en desarrollo, y así como crece, por ejemplo, las necesidades de carreteras, también crece nuestras necesidades de comunicaciones”, dijo Zambrana en entrevista con el canal estatal. El proyecto del segundo satélite de telecomunicaciones avanza, pero todavía no se conoce con precisión cuándo entrará en funcionamiento, aunque se estima que puede ser entre 2020 y 2021.

Entre tanto, el satélite Túpac Katari 1 (TK SAT-1), que opera desde abril de 2014, ya tiene la mayoría de su capacidad ocupada, según Zambrana. “Nuestro satélite está ocupado al 70 por ciento de su capacidad. Lo que queda, digamos, ya no es lo más grande. Es cuestión de tiempo que se ocupe todo”, dijo. ABE, según su director, tiene al menos 50 clientes directos, entre ellos la Empresa Nacional de Telecomunicaciones (Entel), que, a la vez, ofrece a sus miles de usuarios un valor agregado del servicio del satélite. Bolivia empezó a usar satélites desde 1978 y desde entonces se pagó a servicios de empresas extranjeras.

“Hemos llevado 36 años pagando satélites extranjeros y le aseguro en todo ese tiempo, en alquileres, hemos pagado al menos (el costo total de) uno o dos satélites”, apuntó.

COSTOS El satélite Túpac Katari fue lanzando en diciembre de 2013, desde China.

Tuvo un costo inicial de 295 millones de dólares, de los cuales 44,33 millones son del Tesoro General y 251,12 millones otorgados en un crédito del Banco de Desarrollo de China.​ Posteriormente, ejecutivos de la ABE anunciaron que el costó total fue de 302 millones de dólares, según archivos de prensa. En mayo de 2014, Entel y ABE firmaron un contrato comercial por 302 millones de dólares para ocupar el 60 por ciento de la capacidad del satélite por los próximos 15 años. El satélite tiene otros clientes que habrían cubierto hasta el 70 por ciento de la capacidad.