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En medio de un incómodo rumor de fondo para el comercio mundial, con los vientos proteccionistas que vienen del otro lado del Atlántico aún resonando tras la victoria de Donald Trump, las exportaciones alemanas, ese sector de solidez aparentemente granítica, pierden dinamismo. Así lo ha reconocido este martes el instituto de estadística germano, que ha publicado unas decepcionantes cifras de crecimiento del tercer trimestre, con un tímido avance de la economía del 0,2%, el peor dato del último año. "El crecimiento ha perdido inercia positiva", admite el organismo.
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En medio de un incómodo rumor de fondo para el comercio mundial, con los vientos proteccionistas que vienen del otro lado del Atlántico aún resonando tras la victoria de Donald Trump, las exportaciones alemanas, ese sector de solidez aparentemente granítica, pierden dinamismo. Así lo ha reconocido este martes el instituto de estadística germano, que ha publicado unas decepcionantes cifras de crecimiento del tercer trimestre, con un tímido avance de la economía del 0,2%, el peor dato del último año. "El crecimiento ha perdido inercia positiva", admite el organismo.
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